Opinión de expertos en seminario internacional

Los derechos humanos de niños, sin garantía total en el país

VICTOR BALLINAS

En la inauguración del seminario internacional La infancia en situación de explotación: La negación de sus derechos, el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), José Luis Soberanes Fernández, destacó que a pesar de que los instrumentos jurídicos son un logro muy importante para garantizar el respeto de las garantías de los menores, "nuestro país desafortunadamente no se escapa de la explotación sexual a infantes o de prácticas de abuso y explotación laboral, por lo que no se puede hablar de que este aspecto sea una realidad en el país".

La representante regional para México y Panamá del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Yoriko Yasukawa, destacó que aunque en el país se han registrado avances y que el gobierno mexicano ha tomado medidas importantes para el cumplimiento de los derechos de menores, a fin de combatir algunas de las peores formas de las violaciones a sus derechos, también es cierto que aún falta mucho para llegar a la meta del pleno cumplimiento de las garantías de los infantes.

"Mientras haya menores que sufran por los conflictos entre adultos, niños y niñas explotados sexualmente, o que trabajen en lugar de asistir a la escuela, mientras existan menores que no terminan la escuela y que no reciban buena atención de salud o que carezcan de cariño y cuidado, entonces la sociedad no está cumpliendo con su obligación de proteger a la niñez.

La representante de Unicef refirió que los menores son víctimas de la guerra, pues además de que sufren sus efectos algunos son llevados a combatir; asimismo hay menores explotados sexual y laboralmente o los que sufren violencia o maltrato en escuelas u hogares, estas situaciones, subrayó, representan lo peor de los adultos, "la crueldad, la negligencia, la indiferencia, todos estos atributos, significan una traición atroz a la expectativa de que protejamos a los niños".

Por su parte, el senador Miguel Sadot Sánchez Carreño, presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Senado y orador en la inauguración del seminario, expuso algunas cifras reveladoras:

"En el mundo hay más de 5 millones de niñas que se prostituyen; cada año se trafica con más de un millón 200 mil menores, lo cual arroja, según cálculos de la Unicef, ganancias por 7 billones de dólares; además, 246 millones de infantes y adolescentes trabajan en el mundo."

Y en el caso México, la realidad, aseguró el senador, tampoco es alentadora: "de los 52 millones de mexicanos que viven en la pobreza, 24.7 millones son niños, según informes de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Infancia en México". Mahatma Gandhi, refirió el legislador, decía: "La pobreza es la más brutal de la violencia".

También en México, aseveró Sadot Sánchez, 16 mil niños y niñas ejercen la prostitución; 80 por ciento de ese total tienen entre 10 y 14 años. Además 3 millones de menores trabajan y sus edades fluctúan entre los seis y los 14 años. Esta es una realidad que no podemos desconocer y que nos convoca y nos exige a todos los actores políticos una participación directa o ineludible, señaló.

El priísta apuntó que se han registrado avances, como las reformas constitucionales que se realizaron en 2001, que se han reflejado en leyes para la protección de los menores, pero aún cuando se ha logrado una mayor perfección en las disposiciones jurídicas "tenemos una serie de lagunas legales, que el Congreso debe superar".

Destacó que hacen falta políticas públicas destinadas a los niños, a la protección de sus derechos, pero además se requiere que una asignación de recursos específica.

El senador mencionó que una de las causas por las que en el país no se respetan ni se protegen los derechos de los niños es la impunidad, y la no aplicación de las leyes; como ejemplo citó que en el caso de la explotación sexual de infantes "hay corrupción y complicidad de las corporaciones policiacas, y la impunidad se ubica en que sólo 5 por ciento de los delitos termina en sentencia. Faltan muchas cosas por hacer, pero una de las partes más importantes es que las instituciones encargadas de procurar justicia no actúan por negligencia, incapacidad o corrupción".

Marta Sahagún de Fox, esposa del Presidente, en su discurso inaugural destacó que el rostro que hoy tiene la pobreza no sólo es la material, sino la humana, que "ha adquirido rasgos atroces, inimaginables para muchos de nosotros. Por momentos pareciera que es muy difícil ganar la batalla. La explotación laboral y sexual, la violencia familiar, el hambre, la utilización de niñas y niños en las guerra como soldados, o resultando víctimas, la falta de acceso a los servicios básicos de salud y educación y el abandono son sólo algunos de los rasgos de este nuevo rostro, que les está arrebatando su futuro".

La esposal del mandatrio señaló que el problema todos lo conocen. Los diagnósticos son claros, "es tiempo de acciones de respuesta y por ello celebramos la realización de foros como este, porque en el mundo y en México se necesitan hoy soluciones".