México D.F. Sábado 10 de julio de 2004
Después de seis años, Venezuela
se incorpora: Chávez
El Mercosur será un avance, sólo si es
la base de la industrialización: Kirchner
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 9 de julio. El final de la Cumbre
de presidentes del Mercado Común del Sur (Mercosur), dejó
en todos los asistentes la sensación de que se avanzó seriamente
en el proyecto de integración y que la iniciativa se va transformado
en "el principal instrumento para disminuir la vulnerabilidad externa y
obtener ventajas de la globalización que nos permita reducir la
pobreza y la exclusión social", como dijo el presidente argentino,
Néstor Kirchner.
Para el mandatario venezolano, Hugo Chávez, llegó
finalmente el gran día. "Seis años esperé para que
mi país se incorpore al Mercosur", dijo agradeciendo el fuerte apoyo
argentino. En esos seis años mucho ha cambiado en la región
y esto ha permitido de alguna manera diluir las fuertes presiones estadunidenses
-aunque no se acaban- que están en el aire desde los comienzos del
Mercosur, impidiendo avances.
Washington
contó en su momento con mandatarios que eran socios estrechos de
sus proyectos. El Mecosur, con el ingreso de Venezuela como asociado, y
de México como socio observador, tendrá un producto interno
bruto de un billón 383 mil 918 millones de dólares, con lo
cuál se ha duplicado su peso comercial.
Como Estado asociado, Venezuela está en condiciones
de hacer una cantidad de acuerdos comerciales en una actividad que estaba
de alguna manera contenida a la espera de este momento.
Más allá de lo que signifique comercialmente
esta nueva incorporación de asociados, el Mercosur logra proyectarse
hacia el mundo cada vez con mayor fuerza y, como dijeron los jefes de Estado,
esto suma también en el momento de negociar con equilibrio en todo
el mundo. Los avances en las negociaciones con China, India y Rusia, además
de Japón, evidencian que la integración latinoamericana resulta
cada vez más atractiva. Y frente a la comunidad europea la voz puede
sonar más alta. Es muy atractivo un mercado con exportaciones que
suman unos 310 mil millones de dólares y que abarca a más
de 389 millones de habitantes.
No es precisamente lo que puede alegrar a Washington,
cuyos documentos de política exterior hacia la región están
marcados por la reivindicación de la Doctrina Monroe de 1823, de
América para los americanos, interpretada como América para
Estados Unidos, tal como lo resume el documento de Santa Fe IV.
Kirchner planteó abiertamente otro de los problemas
de base: que el Mercosur consolidará los avances siempre y cuando
se transforme en una base muy concreta para la industrialización
de los países integrados, negociando y eliminando todo lo que afecte
el desarrollo equilibrado y acabando con las asimetrías más
difíciles de conllevar en una integración.
Lo importante fue que se avanzó en la eliminación
de conflictos que fueron surgiendo entre algunos países. Todo esto
tenderá a mejorar las próximas negociaciones en el mundo
que debe emprender el bloque a corto plazo, como sucederá a mediados
de julio próximo en Bruselas.
El presidente Chávez, durante su intervención
en el informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, afirmó
que los pueblos no parecen conformes con la democracia y que en América
Latina existen poderes supraestatales.
El informe dejó en claro que en cualquier país
donde la abundante riqueza conviva con la pobreza extrema, la democracia
no podrá ser vista como tal por aquellos que sufren hambre y marginación.
Por eso, Chávez consideró que el Mercosur es una poderosa
herramienta en el objetivo de luchar en forma conjunta para eliminar la
pobreza en América Latina en este siglo.
Como parte de la cooperación energética
convenida entre Argentina y Venezuela, que incluye la creación de
la empresa Petrosur, se informó que se abrirá una Oficina
de Petróleos de Venezuela en Buenos Aires.
El ministro de Energía y Minas de Venezuela, Rafael
Ramírez, dijo que la apertura de esta oficina "dará inicio
a la plataforma para concretar los proyectos", y que el acuerdo de creación
de Petrosur, dejó abierta la invitación para el resto de
los países de la región que deseen participar.
"Hemos estado trabajando con Bolivia, Brasil y Paraguay,
para concretar su incorporación en corto tiempo", dijo Ramírez,
para quien el ingreso de Venezuela es un éxito del gobierno de Chávez.
También en otros rubros avanzará Venezuela, y Chávez
se encontrará con el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva,
en los próximos días.
Otro tema que se difuminó fue una cierta tensión
entre Argentina y Brasil, por restricciones a las importaciones en algunos
sectores y por una semana se suspendieron las que afectaban a los electrodomésticos,
mientras empresarios brasileños negocian un acuerdo para la limitación
voluntaria de los artefactos que llegan desde ese país y afectan
a la industria argentina en recuperación. Pero habrá negociaciones
fuertes en los próximos días, porque el tema de las asimetrías
no es menor, más aun cuando hay procesos de recuperación
y reordenamiento en los distintos países.
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