México D.F. Domingo 11 de julio de 2004
Los operativos violan los derechos de los migrantes, señalan legisladores priístas
La SRE debe presionar a EU para que cancele redadas contra ilegales: senadores
Aproximadamente 500 connacionales han sido detenidos en menos de dos meses
ANDREA BECERRIL
La fracción del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el Senado de la República pedirá nuevamente a la cancillería mexicana que intensifique gestiones ante el gobierno de Estados Unidos para que suspenda las redadas que contra indocumentados mexicanos se llevan a cabo desde junio pasado en los estados de California y Texas, toda vez que se trata de medidas que violan los derechos humanos.
El senador César Camacho Quiroz precisó que en esos operativos extraordinarios que la Patrulla Fronteriza lleva a cabo en esos estados, hasta la semana pasada habían sido detenidos cerca de 500 migrantes, los cuales fueron repatriados a México.
Hizo notar que aunque el gobierno de George W. Bush sostiene que es un "operativo de rutina, sustentado en la facultad soberana de cuidar sus fronteras", en realidad se trata de un programa que va a funcionar por tiempo indefinido y que violenta los derechos humanos de los indocumentados, toda vez que deja a criterio de la Patrulla Fronteriza los mecanismos para seleccionar el lugar donde se llevarán a cabo las redadas, así como las personas que serán detenidas.
Ello ha obligado a los indocumentados a permanecer encerrados en sus domicilios, atemorizados ante la posibilidad de ser expulsados. Incluso, agregó, organizaciones defensoras de los derechos humanos en California, el arzobispo de Los Angeles y congresistas locales han expresado su rechazo absoluto a ese programa.
En la pasada sesión de la Comisión Permanente, senadores y diputados de todas las fuerzas políticas suscribieron un punto de acuerdo en el que se solicita al presidente Vicente Fox llevar a cabo todas las gestiones que sean necesarias para que se suspendan esas redadas.
En el documento destacan que aunque el gobierno mexicano, por conducto de la cancillería, envió una nota diplomática de protesta por la forma en que se puso en marcha ese operativo, toda vez que contraviene acuerdos entre México y Estados Unidos para lograr repatriaciones legales, ordenadas y seguras, poco se ha logrado, pues el Departamento de Estado insiste en que las redadas se dan "dentro del marco de la ley estadunidense".
Recalcan que aunque funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional ordenaron que las redadas se circunscribieran a la franja fronteriza de California y Texas, cerca de 50 congresistas estadunidenses, encabezados por el representante de Colorado, Tom Tancredo, opositor acérrimo a la migración mexicana, exigieron que el operativo continúe, sin tomar en cuenta "las presiones" de México.
Contrario a ello, otros legisladores, como el senador Gil Cedillo o el representante Marco Antonio Firebaugh, declararon que las redadas se han dado en supermercados, autobuses y apartamentos en los que viven solamente latinos.
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