México D.F. Jueves 15 de julio de 2004
Habrá ayuda jurídica y médica
a familiares de víctimas
Ofrece Soberanes apoyo permanente en Juárez
Empresarios empiezan reunión objetando al ombudsman
y terminan con la promesa de trabajar con la CNDH
VICTOR BALLINAS Y RUBEN VILLALPANDO ENVIADO Y CORRESPONSAL
Ciudad Juarez, Chih., 14 de julio. En la colonia
Anapra, ubicada en el desierto juarense, muy cerca de donde hace años
fueron arrojados los cadáveres de niñas y jovencitas ultrajadas
y asesinadas, el ombudsman nacional, José Luis Soberanes,
escuchó el reclamo generalizado de los familiares de las víctimas:
"ya estamos hartas; autoridades van y vienen, y no hacen nada. No queremos
dinero, sino justicia''.
Bajo
un sol quemante y en medio de una polvareda, el presidente de la Comisión
Nacional de Derechos Humanos (CNDH) fue testigo, una vez más, del
dolor de las familiares de las mujeres asesinadas. Con coraje e indignación,
las madres volvieron a exponer sus penas, sin poder evitar las lágrimas
ante la impotencia.
En ese ambiente de dolor y sufrimiento, Soberanes les
aseguró: ''la CNDH sigue con ustedes. Hicimos el informe -hace más
de seis meses- sobre los crímenes de mujeres, niñas y adolescentes
en esta ciudad, pero nuestro trabajo no acaba ahí. Vamos a seguir
trabajando con ustedes".
Se comprometió a que cada ocho días habrá
personal jurídico, médico y sicológico para ayudar
a los familiares de las víctimas, y "yo desde la ciudad de México
continuaré insistiendo ante el presidente de la República,
Vicente Fox; ante el Congreso, y ante las instancias necesarias, con el
reclamo de ustedes, que es muy claro: justicia, justicia para ustedes y
para sus hijas".
Empresarios cuestionan cifras
Antes, el ombudsman nacional se reunió con
empresarios. Estos primero reclamaron las cifras que la CNDH ha publicado
sobre las más de 4 mil 500 desaparecidas. "De dónde salieron
esas cifras que le han hecho mucho daño a la ciudad", argumentaron.
Se quejaron ante el titular de la CNDH de que "con sus
espots en radio y tv, donde habló de esos miles de desaparecidas,
afectó la imagen de Ciudad Juárez". Soberanes, tranquilo,
sin inmutarse, les respondió: "las cifras de las niñas y
mujeres desaparecidas nos las proporcionaron la Procuraduría General
de Justicia del Estado y la fiscalía especial; esas cifras no las
inventamos nosotros".
Luego de la explicación, los empresarios aceptaron
que ''quienes han fallado en Ciudad Juárez son las autoridades,
todas. No han hecho su trabajo. Incluso -denunciaron-, dos días
antes de la elección dijeron que ya nada más había
30 desaparecidas. Son cifras políticas".
Acordaron trabajar junto con la CNDH para llegar a las
cifras reales de desaparecidas y mujeres asesinadas, además de que
se unieron a la exigencia de que se haga justicia.
Indelebles huellas de dolor
En el desierto, las madres de las víctimas narraron
una vez más al ombudsman el desprecio, la prepotencia y la
indolencia con la que han sido tratadas en las instancias de impartición
y procuración de justicia.
"Reconocí el cadáver de mi hija en la morgue
por sus chamorritos; tenía una mordida de perro. Pero en la PGJE
me dijeron qué cómo la había reconocido. Les dije:
'por su ropa', que fue encontrada junto al cuerpo de mi hija.
"Me dijeron que iban a mandar a hacerle exámenes
de ADN a un huesito de ese cuerpo. Al año me dijeron que lo habían
extraviado. Entonces me dijeron que iban a mandar otro huesito a analizar.
Un año más tarde, me aseguraron que el examen fue negativo.
Pedí que me lo entregaran, no quisieron. Ni siquiera me mostraron
el papel con el resultado.
"Seguí insistiendo y a los tres años me
corrieron. Me dijeron: 'váyase a su casa a lavar trastes'. Gracias
a Esther Chávez, de Casa Amiga, que me acompañó, mandamos
a hacer el examen de ADN y salió positivo. Me tuvieron que entregar
los restos que quedaban de mi hija", relató Esther, madre de una
jovencita de 15 años asesinada.
Justicia, fue el reclamo. ''No queremos sanciones administrativas
para los funcionarios, para que salgan libres bajo fianza. Francisco Barrio,
el ex gobernador, y Patricio Martínez, el actual mandatario estatal,
así como los procuradores y subprocuradores, son responsables, no
sólo por omisión y negligencia, sino por complicidad y corrupción",
denunció Norma Andrade.
"Fueron indolentes, abusaron de sus cargos para maltratarnos,
nunca investigaron, no les importaron nuestras hijas. Justicia, queremos
justicia.''
|