México D.F. Jueves 22 de julio de 2004
Aplazan la convocatoria a un periodo extra;
rehúsan legislar al vapor sobre pensiones
Frenan senadores de PRI y PRD eventual fast track
sobre el IMSS
Busca el tricolor incluir en la agenda minutas
de diputados acerca de seguridad nacional
ANDREA BECERRIL Y VICTOR BALLINAS
El acuerdo de los diputados de PRI y PAN sobre convocar
de inmediato a un periodo extraordinario de sesiones para aprobar vía
fast track las reformas a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro
Social (IMSS) se topó en la Comisión Permanente del Congreso
de la Unión con la resistencia de la mayoría de los senadores
priístas y perredistas, que rehusaron legislar al vapor un
tema de tal trascendencia.
Pese
a las expectativas de los diputados del blanquiazul y el tricolor
de que ayer mismo se aprobaría la propuesta de convocar a un periodo
extraordinario, ésta se turnó a comisiones y se discutirá
hasta el próximo miércoles 28, cuando vuelve a sesionar la
Permanente. Además, los senadores priístas, encabezados por
el coordinador Enrique Jackson, exigieron que junto con la reforma a la
Ley del IMSS se incluyera en la agenda, en ese eventual periodo extra,
el tema seguridad nacional, de manera específica las minutas que
están en San Lázaro sobre combate a la delincuencia organizada.
La posibilidad de que se apruebe citar a ese periodo extraordinario
depende de una reunión a puerta cerrada que el lunes sostendrán
los 60 senadores del PRI, toda vez que una buena parte de ellos están
preocupados por las implicaciones y riesgos de aprobar una reforma cuestionada
desde su nacimiento. Jackson se comprometió ante un grupo de trabajadores
del IMSS, que ayer llevaron a cabo un plantón fuera del recinto
senatorial -donde sesionó la Permanente-, a no aprobar nada que
lesione el contrato colectivo de ese gremio.
"Me parece que no se puede reducir el tema sólo
al régimen de jubilaciones y pensiones. Sería una solución
muy parcial, muy miope, hay que verlo en forma mucho más amplia."
Jackson dio "su palabra" a los manifestantes de escuchar
a la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social
antes de tomar una decisión en torno a las reformas, aprobadas en
comisiones de diputados, por las que se busca modificar el contrato colectivo
de ese gremio para que en adelante sean los sindicalizados los que paguen
su jubilación, sin aportación ya de cuotas obrero-patronales.
"Lo que nos importa es cómo vamos a fortalecer
y a preservar el Seguro Social. Nos interesa una solución integral
que garantice la viabilidad del instituto. Ese es el fondo del problema,
no sacrificando a los trabajadores", respondió Jackson a los manifestantes,
quienes le pidieron que el PRI "no le haga el trabajo sucio al gobierno
de Vicente Fox".
Si el PAN "y el gobierno de derecha están con los
empresarios y con el Banco Mundial, que sea ese partido al que le pida
cuentas el pueblo de México; el PRI todavía pueda salvar
la situación", insistió un integrante del grupo Revolución
Blanca. Jackson lo escuchó y adelantó que no se aprobaría
en la sesión de ayer citar al periodo extra.
Más tarde, Jackson habló vía telefónica
con el director del IMSS, Santiago Levy, a quien le dijo claramente -según
comentó después- que los priístas en el Senado no
aprobarán una iniciativa que se centre sólo en el régimen
de pensiones y jubilaciones, y que el instituto tiene que poner su parte,
porque se requiere todo un paquete que incluya mejorar el servicio que
presta el instituto, las condiciones de trabajo de médicos y enfermeras,
equipo suficiente, fármacos y ampliación de la cobertura
a la población desprotegida.
Desde un día antes, los priístas habían
expresado a Jackson su rechazo a sumarse a lo que muchos consideran un
intento de albazo legislativo de los diputados de su partido y del
PAN. De hecho sólo tres senadores firmaron la iniciativa de ley
que llevó una semana antes al pleno de la Permanente el diputado
Manlio Fabio Beltrones: Genaro Borrego, Netzahualcóyotl de la Vega
y Miguel Angel Navarro.
Ayer por ello poco pudieron hacer los diputados, toda
vez que la propuesta para convocar a un periodo extra a partir del próximo
día 29, con el fin de discutir los cambios a los artículos
277 D y 286 K de la Ley del Seguro Social, fue turnada a comisiones.
La propuesta que llevó a tribuna Cecilia Romero
en nombre de Fauzi Hamdan, Germán Martínez y otros panistas
debió ser modificada, ya que los senadores del PRI exigieron que
en la agenda de ese eventual periodo, además de la iniciativa del
IMSS, se incluyeran las minutas en materia de seguridad pública
que están en San Lázaro.
No hubo discusión. El debate se dio entre los propios
priístas. Beltrones y el senador Emilio Gamboa se encerraron por
más de una hora en la oficina de Jackson. Más tarde, la senadora
Georgina Trujillo -a la que se ubica como operadora política de
Roberto Madrazo- platicó también con el coordinador.
Sin embargo, la discusión decisiva será
el lunes, durante la encerrona de la bancada priísta. Los senadores
Manuel Bartlett y César Camacho explicaron que no hay una postura
única de la fracción, toda vez que requiere analizar a detalle
las implicaciones de esa reforma, determinar si viola preceptos legales
y si, como han argumentado los trabajadores del IMSS, violenta su contrato
colectivo.
Durante la sesión el diputado perredista Pablo
Gómez puso a pensar a los priístas cuando preguntó
en tribuna si avalarán que el Congreso, "a despecho de lo establecido
en la Constitución, sea el que determine y modifique una relación
contractual".
Gómez recalcó que la reforma pretende regresar
al siglo XIX, cuando no había seguridad social ni atención
médica y los trabajadores tenían que sufragar esos gastos
con sus propias aportaciones. "Hoy se pretende en la ley crear una mutualidad,
donde las cuotas obreras sean obligatorias, y el patrón nada aporte
pero sea el que administre el fondo."
Advirtió también que además la reforma
no va a resolver ningún problema financiero del IMSS, y volvió
a preguntar si esos cetemistas "que andan tan movidos" para que se modifique
el régimen de pensiones de los trabajadores del Seguro Social, estarán
de acuerdo después con que también se cambien los sistemas
pensionarios en la Comisión Federal de Electricidad o en Petróleos
Mexicanos. Se trata, insistió, "de una subversión al derecho
del trabajo en este país".
Esto es parte de los argumentos que los priístas
van a discutir precisamente el lunes.
Se consuma la aprobación del dictamen
sobre el IMSS en comisiones de diputados
Aguarda el PRI decisión sobre Echeverría
Pospone el tricolor su respuesta a un eventual
periodo extraordinario para sacar la reforma
ENRIQUE MENDEZ Y ROBERTO GARDUÑO
La
aprobación del dictamen de reforma a la Ley del Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS) en la Comisión de Seguridad Social de la
Cámara de Diputados no resultó suficiente para que el PAN
consiguiera el apoyo del PRI en la Comisión Permanente del Congreso
de la Unión, tendiente a aprobar un periodo extraordinario de sesiones,
y sirvió a los intereses de los priístas, porque esperarán
hasta la semana entrante para tomar una decisión, una vez que la
fiscalía especializada sobre desaparecidos proceda en torno a la
presunta responsabilidad del ex presidente Luis Echeverría Alvarez
en genocidio por la represión del 10 de junio de 1971.
En menos de una semana, los diputados de PRI y PAN que
integran las comisiones de Hacienda y del Trabajo y Previsión Social
aprobaron el dictamen de la iniciativa con proyecto de decreto que reforma
y adiciona los artículos 277 D y 286 K de la Ley del Seguro Social,
para evitar que las reservas financieras y las cuotas obrero-patronales
continúen financiando el régimen de jubilaciones y pensiones
del instituto.
Ayer priístas y panistas no se salieron del libreto
y aprobaron el documento en la Comisión de Seguridad Social. Lo
hicieron con 16 votos de Manuel Pérez Cárdenas, Graciela
Larios, Marco Antonio García Ayala (secretario del sindicato de
la Secretaría de Salud), David Hernández, Armando Neyra,
Alfonso García, Rogelio Rodríguez, Pablo Anaya, Roberto Colín,
Israel Gallardo, Gisela Lara, Miguel Angel Llera, Juan Molinar Horcasitas,
Carlos Tiscareño y Tomás Trueba.
En contra se manifestaron ocho votos: Miguel Alonso Raya,
Roberto Vega (líder del sindicato del IMSS y diputado priísta),
Oscar Ramos, Agustín Rodríguez, Rafael García, Francisco
Carrillo Soberón, Rocío Sánchez y Francisco Amadeo
Espinosa.
En un hecho poco usual en la Cámara de Diputados,
a las 09:40 en punto de la mañana -hora de la cita- se inició
la sesión de la comisión. Esa puntualidad obedeció
a que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión comenzaría
sus trabajos en el Senado a las 11 de la mañana, y a priístas
y panistas les corría prisa por aprobar el dictamen para enviarlo
al órgano legislativo con objeto de que se aprobara un punto de
acuerdo de urgente y obvia resolución, para convocar a periodo extraordinario,
a celebrarse entre los días 27 y 29 de julio.
En San Lázaro la sesión de la Comisión
de Seguridad Social se consideraba de trámite, porque la mayoría
de priístas y panistas no abrían un resquicio para rechazar
el dictamen. No obstante, Miguel Alonso Raya exhortó a los integrantes
del grupo de trabajo a emprender una "reforma a fondo" en el IMSS. Roberto
Vega rechazó la intentona de aprobatoria, y Marcela González
invocó el Congreso para "arreglar" la política.
De otro lado, Manuel Pérez Cárdenas aseguró
que los derechos de los ex trabajadores y los que se encuentran en activo
no serán afectados; Juan Molinar Horcasitas se sumó a su
compañero -Pérez Cárdenas- y explicó que no
habrá modificación a los derechos de los empleados del IMSS.
En ese tono, el priísta Armando Neyra defendió el dictamen
porque "no es justo" que 12 millones de trabajadores ganen menos que los
más de 300 mil del Seguro Social.
Al concluir la ronda de intervenciones acordadas por el
pleno de la comisión, el presidente de ese órgano preguntó
a los asistentes si se permitía que tres diputados de PRD y PT intervinieran;
los priístas y panistas rechazaron la solicitud y el dictamen se
votó con resultado de 16 votos en favor y ocho en contra.
Después de la sesión, una veintena de integrantes
del comité ejecutivo del sindicato del IMSS increparon a los legisladores
de PRI y PAN. Una mujer les lanzó monedas y comenzó un coro
que acusaba a quienes aprobaron el dictamen: "¡Cirqueros, traidores!,
¡ratas asquerosas!, ¡Horcasitas, ojalá te atiendas en
el IMSS!, ¡ésos son los que chingan la nación!"
Cambio de señales en el tricolor
A la misma hora que se aprobó el documento en San
Lázaro, en el Senado el priísta Enrique Jackson evidenció
que su partido movería el proceso de acuerdo con sus tiempos. El
presidente de la Permanente dijo que sus compañeros no aceptarían
el punto de acuerdo para convocar al periodo extra. Deberán reunirse
el lunes para deliberar sobre la factibilidad del dictamen. Por estatutos,
los priístas deben llamar a reunión plenaria de su fracción
para analizar propuestas de reforma.
Ante ese escenario, ayer por la tarde en San Lázaro
hubo una serie de consultas tendientes a allanar el "camino a la política
y a la negociación", para impulsar una reforma a fondo en el IMSS.
Se supo que Roberto Vega recibirá una propuesta
de negociación de las secciones disidentes de su sindicato para
presentarla ante el gobierno federal, y de esa manera evitar la modificación
que el PRI y el PAN pretenden lograr en el Congreso.
En esas propuestas se encuentra la de incrementar las
cuotas de los trabajadores del instituto para su retiro de 3 a 6 por ciento
del salario vigente hasta llegar a nivel nacional; que los de nuevo ingreso,
tanto mujeres como hombres, se retiren a los 35 años de servicio;
que aquellos en activo se retiren a los 35 años de labores, y que
sigan empleados un trimestre más por año que les reste para
su jubilación.
En ese contexto, los priístas consideran que su
compañero Roberto Vega tiene margen de negociación con las
autoridades foxistas, y por lo tanto el escenario para su partido se amplió,
porque podrán mañana esperar la decisión de la fiscalía.
Atenta el proyecto oficial de jubilaciones contra derechos de los trabajadores, opina
"Un retroceso", la iniciativa foxista: Cárdenas
RENATO DAVALOS
La pretensión del gobierno y su gente cercana en torno al régimen de jubilaciones y pensiones del Seguro Social constituiría un retroceso que de ninguna manera es aceptable porque va contra los derechos de los trabajadores, expuso Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, ex candidato presidencial perredista.
Entrevistado poco antes de iniciar un foro sobre la integración de México en el continente, convocado por las fundaciones Rosenblueth, para la Democracia, y Colosio, Cárdenas expresó que la crisis financiera del Seguro Social podría resolverse a partir de la revisión de las reformas que se hicieron en 1997.
Tendría que saberse, apuntó, por qué desaparecieron fondos que estaban constituidos para hacer frente a las pensiones y jubilaciones, y revisarse una serie de cuestiones antes de pretender disminuir los logros de los trabajadores.
En el foro participó el ex subsecretario de Relaciones Exteriores Gustavo Irueguas, quien apuntó que el ámbito comercial del país, como muchos otros sectores de la vida nacional, reflejan que no hay un proyecto claro de nación.
A su vez, Beatriz Paredes, presidenta de la fundación Colosio del PRI, sostuvo que particularmente nunca compartió a plenitud la integración mexicana con América del Norte.
El cambio de una economía cerrada a una abierta supuso que la pequeña y mediana industrias, y particularmente sectores como el campesino, empezaran a vivir la competencia "y no tuvieran capacidad de sobrevivencia frente a un modelo despiadado", señaló.
A su vez, el analista Rolando Cordera estableció que es necesario preguntarse si procede la revisión de un radicalismo en el que se sustentó la integración al norte y se descuidó el mercado interno. "Tenemos que hablar hoy -añadió- de nacionalizar la globalización."
Por su parte, Antonio Ortiz Mena también coincidió con Iruegas en que no hay un proyecto claro de nación, y señaló que los problemas tienen que ver hoy con la pobreza y con una distribución no equitativa del ingreso.
La sociedad quiere decisiones, no juegos de vencidas: Fox
Aplaude Creel compromiso de legisladores con el IMSS
CLAUDIA HERRERA BELTRAN
El presidente Vicente Fox advirtió que es necesario anteponer el interés general al particular o de grupo para atender asuntos como el del régimen de pensiones, y convocó a los actores políticos y sociales a trabajar con visión de futuro, porque la sociedad "quiere que tomemos decisiones y asumamos costos, no que juguemos a las vencidas".
En tanto, el secretario de Gobernación, Santiago Creel, hizo un reconocimiento al "compromiso" demostrado por los legisladores que dictaminaron el proyecto para reformar la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ya que lo hacen con una "visión de largo plazo".
Los funcionarios tienen la instrucción del mandatario de no postergar la solución de los grandes problemas nacionales y de "apretar el paso" para que las nuevas generaciones tengan un futuro promisorio, dijo.
Fox apenas se refirió al tema de las pensiones en momentos en que la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados aprobaba las reformas a la Ley del IMSS (con el voto en contra de perredistas y petistas), como paso previo a su discusión en la Comisión Permanente del Congreso.
Durante la entrega del Premio Nacional de Demografía, en Los Pinos, Fox ubicó la política de población como ejemplo de lo mucho que se puede alcanzar cuando existe unidad de propósitos.
Hoy necesitamos multiplicar este ejemplo, añadió, y llevarlo al terreno de la seguridad pública, al de pensiones, al del combate a la pobreza, para vencer los obstáculos y las inercias que frenan el desarrollo del país.
Y convocó a los actores políticos y sociales a recuperar la altura de miras por el bien de México. "Trabajemos con visión de futuro, por encima de coyunturas, de colores partidistas, de calendarios electorales."
Sin hablar abiertamente sobre la iniciativa de reforma, que ha despertado polémica porque pone candados presupuestales para el pago de las pensiones, expuso que la sociedad exige resultados y que se tomen decisiones y se asuman los costos, "no que los políticos jueguen a las vencidas".
En democracia, explicó, la cooperación es la convicción plena de que nadie puede llegar a la meta si no llegan todos. "En democracia estamos obligados a mantener abiertas las vías del diálogo y el entendimiento en el marco del estado de derecho."
Y de nueva cuenta hizo alusión a la política de población como una buena muestra de que los mexicanos pueden encarar convergencias en la pluralidad, de que son capaces de poner en marcha estrategias que beneficien a todos, en primer lugar al país.
En la misma ceremonia, el secretario de Gobernación felicitó a los legisladores que dictaminaron la reforma del Seguro Social, porque contribuyen a preparar a las instituciones para que sean capaces de atender con eficacia, oportunidad y equidad a los adultos mayores y garantizarles una vida digna.
"Nuestro reconocimiento al compromiso de estos legisladores que trabajan precisamente para las futuras generaciones", afirmó.
Coincidió con Fox en hacer un llamado a actuar con responsabilidad, porque si no se procede así, las futuras generaciones tendrán problemas más grandes que los actuales, como el sistema de pensiones, que fue aprobado en una época en la que no se previó el porvenir.
Señaló que uno de los retos de la política de población es que dentro de algunas décadas México dejará de ser un país joven y el número de adultos mayores alcanzará cifras inéditas. Al igual que hace 30 años, cuando se debatía la necesidad de encarar el crecimiento de la población, hoy los mexicanos se encuentran ante la disyuntiva de actuar con previsión o heredar a las futuras generaciones "problemáticas que podrían comprometer su bienestar".
Para enfrentar este desafío, dijo que México necesitará más recursos para atender sus necesidades sociales, pero aseguró que esto será imposible de hacer sin fortalecer las finanzas públicas.
Por ello, el secretario de Gobernación afirmó que las autoridades federales insistirán en una reforma hacendaria con sentido social, en el contexto de la convención nacional en la materia, para que ésta pueda contribuir a que haya un saneamiento adecuado de las finanzas públicas.
Avala Carlos Abascal la iniciativa priísta
El titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Carlos Abascal Carranza, dijo que lo ideal es diseñar un nuevo régimen de jubilaciones y pensiones para los futuros empleados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Aun cuando no hizo referencia a la iniciativa de reforma a la Ley del IMSS que promueven diputados de PRI y PAN, el funcionario señaló que tanto la administración del organismo como el gobierno federal deben asumir "sus propios compromisos", como única alternativa para "empezar a cambiar la tendencia de deterioro" del instituto.
Entrevistado en un noticiero radiofónico, Abascal manifestó que está de acuerdo en que los nuevos empleados del IMSS, como lo establece la reciente iniciativa de reforma, contribuyan con lo que sea necesario para financiar su propio régimen de jubilaciones. Que sean ellos, agregó, "quienes permitan la autosuficiencia de la reserva que habrá de servir de base para el pago de las cuotas".
Por su parte, el dirigente del sindicato de trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo -Metro, Fernando Espino, diputado por el Partido Verde Ecologista de México, dijo que aunque esta bancada dé su visto bueno a la reforma de la ley del IMSS, aseveró que en lo individual votará en contra porque "no participaré de un fraude a la ley...Si se aprueba la enmienda (en un periodo extraordinario a realizarse la semana próxima) los legisladores del sector obrero con qué cara vamos a enfrentar la reforma a la ley del ISSSTE", dijo. FABIOLA MARTINEZ
Brinda cada año más de cien millones
de consultas y 2 millones egresan de hospitales
IMSS, única alternativa de recuperar la salud
para millones de pacientes
Pese a las restricciones presupuestales, en el instituto
nace uno de cada tres mexicanos
ANGELES CRUZ
En
las clínicas y hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social
(IMSS) se realizan más de cien millones de consultas clínicas
y casi 2 millones de egresos hospitalarios cada año. Para la mayoría
de esos pacientes, la institución representa la única alternativa
para recuperar la salud e, incluso, salvar la vida.
Desde la atención de padecimientos simples hasta
cirugías de alta complejidad tienen lugar todos los días
en el IMSS, considerado el organismo de seguridad social más importante
de América Latina.
En el IMSS, donde nace uno de cada tres mexicanos, los
derechohabientes cuentan, a pesar de las restricciones económicas
y el evidente deterioro en la calidad de los servicios, con herramientas
tecnológicas de vanguardia y, principalmente, con la preparación
profesional de los médicos especialistas que se emplean a fondo
en las más variadas situaciones, como el trasplante de "hígado
a la medida" que se realizó a Luis Enrique Rodríguez, de
6 años de edad. El órgano era de un adulto de 40 años
y fue reducido 40 por ciento para adaptarlo a la cavidad del menor.
Hijo de un chofer de camiones de carga pesada, Luis Enrique
nació con una oclusión de vías biliares, que le habría
ocasionado cirrosis hepática y la muerte.
También se han efectuado intervenciones en fetos
para corregir anomalías como la hidrocefalia. Ese fue el caso de
una bebé a la que en la semana 29 de gestación se le detectó
el mal y la correspondiente afectación en su desarrollo.
La cirugía se efectuó por primera vez en
México en 1999. Implicó anestesiar a la madre -entonces de
18 años- y al producto, sacar la cabeza de la bebé del vientre
materno y colocarle una válvula que drenara el exceso de líquido
cefalorraquídeo. Tres semanas después la señora dio
a luz a una niña sana, mediante una operación cesárea
sin ninguna complicación.
La red de clínicas y hospitales del IMSS consta
de mil 767 unidades; mil 504 son de medicina familiar, 223 hospitales generales
o regionales, y 40 de especialidades. Ahí se brinda servicio a más
de 32 millones de derechohabientes. Según un informe institucional
reciente, este número se elevó a 41.8 millones.
En uno de esos nosocomios recobró la salud una
señora de nombre Rosa María. Durante siete años desarrolló
un tumor en la vena cava -la más importante del organismo, que transporta
65 por ciento de la sangre de regreso al corazón.
La paciente, de 50 años, estuvo en peligro en 2002,
cuando el carcinoma prácticamente le obstruyó la circulación
sanguínea, lo cual le habría ocasionado un infarto fulminante.
El tumor llegó a medir 1.5 metros de largo y a pesar 300 gramos.
Iba de la ingle izquierda por la vena cava inferior y llegaba hasta las
cavidades derechas (aurícula y ventrículo) del corazón.
En su extirpación participaron 15 médicos de diferentes especialidades.
En sus 61 años de existencia, el IMSS ha crecido
en infraestructura y capacidad técnica de atención, aunque
en años recientes se ha visto limitada por las restricciones presupuestales.
Los trasplantes también forman parte de las actividades
médicas del IMSS. Ahí se efectúa aproximadamente 40
por ciento de todas las cirugías de este tipo que se practican en
el país, incluso las más complejas, como para sustituir el
corazón.
En 2003, Tomás de León Valdivia, de 38 años,
fue beneficiario de un trasplante de corazón, después de
sufrir tres infartos. Una vez que apareció el donador, la operación
quirúrgica se realizó de inmediato y cuatro horas después
Tomás de León portaba un corazón sano.
En abril pasado, médicos del IMSS realizaron por
primera vez con éxito la separación de unas siamesas unidas
por tórax y abdomen. Compartían el hígado, sus corazones
estaban cubiertos con un solo saco pericardio y sus pulmones con una sola
pleura (bolsas que envuelven y protegen a estos órganos). Las menores
carecían, además, del tórax anterior.
Para lograr su separación, especialistas del Centro
Médico Nacional La Raza colocaron una malla de titanio para remplazar
caja torácica y músculos, porque las menores tampoco tenían
los arcos anteriores de las costillas. Los médicos calculan que
en dos años podrán efectuar otra cirugía y mejorar
más sus condiciones físicas. A la fecha, una de las bebés
sigue hospitalizada. La otra fue dada de alta y continúa bajo estricta
vigilancia médica.
Erick Alejandro Ayuso Espinosa vive en Veracruz. En 2003
tenía 7 años. Un día salió de la escuela y
no esperó a que llegara su madre a recogerlo. Caminó hacia
su casa junto a las vías del tren y no se percató que el
ferrocarril se acercaba. Sintió un golpe en la cabeza. Al levantarse
vio que le faltaba el brazo izquierdo.
A los pocos minutos llegó su mamá, quien
recogió la extremidad, la colocó en hielo y se trasladó
al Centro Médico Nacional Adolfo Ruiz Cortines del puerto veracruzano.
Ahí, el equipo médico encabezado por Andrés Torres
Zamudio procedió a fijar el hueso, identificar y unir los segmentos,
arterias, tendones, nervios y vasos sanguíneos para reconstruirlos
a nivel del codo. Aunque éste no tiene movilidad, el niño
tiene útiles el brazo y la mano. Lo atendió el IMSS, cuyo
enorme potencial es patrimonio de todos los mexicanos.
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