ASTILLERO

Julio Hernández López

De esposas y otros amores

Nobel y Similares

Amasiato PAN-PRI
Ponce regresa en segundo piso
El Mayor Echeverría

CONMOCION político-matrimonial parecía estar dispuesta a provocar ayer la Secretaría de Gobernación al asegurar que sus funcionarios no cuentan con esposas. ƑConfesión de celibato asumido con tal de llegar a Los Pinos? ƑSoltería como jugada desesperada del crédulo Creel? ƑPromesa de que si llega al poder no pugnará por convertir a su cónyuge en aspirante al relevo? Nada de eso: el subsecretario panista Armando Salinas Torre, apodado sin antecedentes cetemistas conocidos como El Charro, se refería a las pulseras metálicas de control policiaco que juraba jamás habían usado agentes de migración contra Betty Williams, la premio Nobel de la Paz de 1976 que fue invitada a visitar México por la Nobel Simi, Rigoberta Menchú, quien había denunciado inexplicables maltratos y el uso de los anillos apresadores de hierro en un confuso episodio en que según la fundadora del Movimiento para la Paz de Irlanda del Norte habría sido arrestada, esposada y obligada a firmar documentos en español, que no habla. Más tarde el incidente fue atemperado mediante disculpas ofrecidas por el gobierno mexicano y aceptadas por la visitante, gracias sobre todo a los buenos oficios de Magdalena Carral, la socialité mexicana que sólo por hacerle el favor a su amigo Santiago se encarga de los asuntos migratorios entre fiesta y fiesta de alta sociedad. Según chalanes del aeropuerto que forman parte del servicio de contrainteligencia de esta columna, los agentes de la Migra del Benito Juárez se emocionaron al ver que el boleto de avión de una señora que decía llamarse Betty Williams en realidad estaba a nombre de Elizabeth Neri Williams, que su fotografía en el pasaporte no se parecía a la imagen en vivo y que en un descuido y estaban evitando un atentado contra la campaña del doctor Simi.

SIN ESPONSALES (más bien en concubinato fugaz con olor a jabón chiquito de hotel por horas), la decencia panista y el agandalle priísta se aventaron ayer el tiro de aprobar reformas a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social, importándoles un comino el qué dirán los envidiosos y mal pensados que critican y protestan por ese desliz de amor causado por sublimes arrebatos de tianguismo político en el que hoy se ayuda a los proyectos empresariales de exterminio de la seguridad social a cambio de que el gobierno federal evite la consignación del simbólico Luis Echeverría o, en dado caso, integre las averiguaciones de tal manera que por su intencional confección equívoca cualquier juez en simple ejercicio de análisis jurídico las anule, dejando así en libertad al Gran Halcón y permitiendo una salida presuntamente decorosa al fiscal de la guerra sucia (simple suministrador de atole con el dedo, según sostenida creencia de este doctor en ciencias del escepticismo).

DESDE ALGUN CASINO de Las Vegas (otros dicen que de Brasil o de Argentina), el ex secretario de apuestas del gobierno capitalino, Gustavo Ponce, ha iniciado su defensa jurídica, consiguiendo la suspensión provisional de una orden de aprehensión en su contra (esta es también una historia de amor y de esposas abnegadas: recuérdese el papel estelar de la Primera Dama de Ponce en el pago de deudas de juego y en transferencia de fondos al extranjero). A nadie debe asombrar que el asomo documental del misterioso ex funcionario se dé varios meses después de su aparición triunfal en el Canal de las Estrellas (por cierto, a Ramón Sosamontes le están contratando también sus cinco minutos de fama que creyó posible eludir). Si no hubiese sido por ese incidente televisivo, tal vez Ponce hubiese seguido como encargado de las finanzas chilangas y, aunque se hubiese ido religiosamente cuatro días de cada semana a retozar en mesas de fieltro verde, su jefe ni siquiera se habría enterado de esas ausencias (laborales, no de dinero, pues la peje administración ya ha jurado y perjurado, casi a punto de sacar un cómic exclusivo sobre el tema, que el tahúr encargado del erario nunca se birló un centavo de las arcas). No pierda de vista el amable lector de estos desvaríos astillados el hecho de que el estratégico Ponce esté de regreso, mediante gestiones jurídicas que pronto requerirán de su presencia física, cuando arrecia la exhibición de datos en el sentido de que para construir obras viales de alto impacto electoral el gobierno capitalino habría hecho maniobras tramposas de transferencias de fondos de unas partidas a otras, ingeniería financiera a cargo del gran mago Gustavo ahora oportunamente resucitado. ƑNuevo golpe seco en camino, todo en el marco de los amoríos secretos PAN-PRI?

MAS MINUCIAS DEL reino de las bajas pasiones políticas desatadas: el secretario de Salud sigue casado con los escándalos. Que si deja a niños chiapanecos muriéndose mientras viaja por Europa con cargo al gobierno en busca de un puesto internacional. Que si su comisionado para luchar contra las adicciones era un vicioso de las transas. Y, ahora, que los legisladores federales quieren saber por qué convirtió El Castillo de la Pureza de Jorge Serr-Ano (ni modo de decir: Serr-Trasero) Limón en un table dance de ultraderecha denominado Pro Tanga. En Tlaxcala, mientras tanto, el primer esposo del estado busca anotar en el Libro Guinness la consulta popular más rápida, pues en cuestión de horas dice haberle preguntado a sus conciudadanos si querían que los dejara mientras su esposa preparaba a gusto la instalación de una dinastía pulquera, a lo que los asustadísimos gobernados respondieron al unísono que no, que quieren que Ponchito le limpie el camino a su esposa Mar(t)i(ta) Carmen para que la parejita se eche 12 años de sacrificio (en tanto algún hijo llega al relevo). Y el sargento Echeverría que para salvarse de castigos terrenos está estudiando la posibilidad de acogerse a los beneficios del fuero militar, aunque sabido es que cuando fue presidente no ejercía como general sino, a la fecha, como Mayor. šAh, un señor alto, de bigotito, dijo ayer quién sabe qué respecto a asuntos migratorios, y que no hay que cerrar los ojos ante esos problemas, y que en lo político no hay que andar jugando venciditas, y que quién sabe qué más!

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