El encuentro comenzará el viernes en la explanada de la delegación Venustiano Carranza

Convite con torta de 25 metros abrirá festival nacional

JAIME WHALEY Y ANTONIO CASTELLANOS

"Acá las tortas" es la famosa convocatoria que cobrará mayor vigencia a partir de mañana viernes, cuando se abra, al filo del mediodía, la Feria Nacional de la Torta, que intenta la recolocación, como lo asentaría cualquier ejecutivo yuppie, de una parte de la vital triada de las T, en el dieta cotidiana en México.

La explanada de la delegación Venustiano Carranza será la sede del acto que culminará el domingo por la noche y en el que están apuntadas con sus productos 33 torterías del área metropolitana.

"Intentamos recuperar la elección de la torta como parte fundamental de la nutrición", explicó Roberto Vivanco, director de Comunicación de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera, que, junto con el gobierno capitalino y la citada demarcación organizan la feria que abrirá con un convite de la gran torta de unos 25 metros de largo que será confeccionada por los torteros de igual número de establecimientos.

Ante el embate mercadotécnico de la llamada fast food -pizzas, hamburguesas, sushis y demás indigestivos- que inunda y coloniza los paladares nacionales, la torta, dice Vivanco, se halla en franca desventaja. Y da cifras, grosso modo: en el país existen cerca de 20 mil torterías -unas 2 mil de ellas en el Distrito Federal-, que en total dan empleo a casi 70 mil personas y las torterías contribuyen con 8 por ciento del mercado de 36 mil millones de pesos al año que reporta la comida rápida.

La teleras, insustituibles -con bolillo no saben igual-, que se utilizarán para la megatorta del viernes, serán proporcionadas por la panificadora La Virgen del Camino, de Eje Central, negocio que inauguró ayer un horno electrónico -"pero con piso de piedra, como los antiguos"-, explicó Javier, así, a secas, el panadero-administrador, y aprovechó la ocasión para hacer una apología del emplastado entre un pan rebanado.

"La torta -dijo- es un alimento que proporciona nutrición completa. Lleva, por supuesto, pan, lácteos, leguminosa (frijol), verdura, fruta (aguacate) y, desde luego, el ingrediente principal, como milanesa, huevo, en fin, de lo que se pida. Qué más se puede exigir".

De la panificadora salieron ayer tres teleras, como botón de muestra, de un metro que en menos de 15 minutos fueron rellenadas por expertos de tres torterías: la de Don Polo, famosa parada técnica en Félix Cuevas, en el Multifamiliar Miguel Alemán; la de Benhu, aledaña al Metro Chapultepec, pero originalmente de Atlacomulco, estado de México, y de La Tolta, ubicada en la zona fabril de Cuautitlán. El contenido fue variado, del chile relleno a la tinga de res, incluido jamón y milanesa.

El comercio informal también está afectando a los negocios de tortas establecidos y es urgente que la autoridad frene a los que no pagan impuestos ni seguro social e Infonavit, afirmó Francisco Juárez, vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera.

Juárez se reunió con los reporteros en los hornos de la Panificadora La Virgen, localizada en Lázaro Cárdenas, donde Julián Castañón, dueño de la empresa, explicó la forma en que se horneará.

Juárez, dirigente de los restauranteros en el Distrito Federal, dijo que el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, ya confirmó su asistencia. "No necesitamos ningún récord mundial, porque la torta es mexicana y su tamaño no tendrá precedente. Representantes de las principales torterías registradas en el país asistirán a comercializar sus productos", precisó.

La primera tortería de que se tiene registro es Tortas Armando, que se estableció en el Distrito Federal en 1892. También está la Texcocana y las Tortas Hipocampo. Estas últimas son las únicas que han crecido, porque la mayoría son negocios familiares.

En el Distrito Federal hay unas 2 mil torterías registradas. El precio es de 12 pesos en promedio, pero las hay también de 6 pesos que se expenden en las banquetas de la ciudad, sin ninguna seguridad sanitaria. No pagan impuestos y es urgente que la autoridad frene su proliferación.

Dijo que los torteros registrados en la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera están dispuestos a que se aplique 6 por ciento de IVA, sin perjuicio de los consumidores. Los verdaderos empresarios pueden acreditar ese impuesto ante las autoridades hacendarias porque ya lo pagan en la compra de los insumos.