Annette Aurélie Desmarais

Vía Campesina exige "tierra, alimentación, dignidad y vida"

A la vuelta del siglo XX, el renombrado anarquista Pieter Kropotkin, sabiamente argumentó que dicho y hecho todo lo necesario "la cuestión del pan" seguía siendo la cuestión social preeminente. La situación sigue así. Sea que los movimientos de resistencia luchen contra la privatización de sus tierras comunales, contra la imposición de organismos genéticamente modificados en sus cultivos, contra las incursiones de la industria en la nanotecnología y sus intentos por expandir la irradación alimentaria¹, o que negocien acuerdos comerciales -todo se conecta a la agricultura y a quienes producen e ingieren alimentos.

El momento político es muy importante para un movimiento como Vía Campesina. Y no dejará que las oportunidades se diluyan. Bajo la consigna de "organicemos la lucha: tierra, alimentación, dignidad y vida", más de 400 participantes de 70 países se reunieron en la Cuarta Conferencia Internacional de Vía Campesina efectuada en Itaici, Brasil, a mediados de junio de 2004. La reunión tuvo como meta analizar el contexto global actual, fortalecer las estrategias de resistencia y examinar de manera crítica la dinámica interna del movimiento.

La Conferencia de Vía Campesina consolidó posiciones y planes de acción a futuro en siete aspectos clave: soberanía alimentaria y liberalización del comercio, biodiversidad y recursos genéticos, reforma agraria, género, agricultura campesina sustentable, derechos humanos y migración. El trabajo en derechos humanos, por ejemplo, incluye presentar una Carta de Derechos Campesinos a la comisión de derechos humanos de Naciones Unidas. Al integrar al Border Farmer Workers Project (un proyecto de trabajadores agrícolas fronterizos) con sede en Estados Unidos, que trabaja cercanamente con organizaciones de otros continentes, Vía Campesina le presta ahora mucho más atención a la migración y a los derechos de los jornaleros migrantes.

Sin embargo, uno de los aspectos más críticos en el programa de la Conferencia de Vía Campesina fue el acceso a la tierra. Después de todo, un campesinado sin tierra no puede producir comida, llevarla al mercado, ni preocuparse por semillas; además, los campesinos requieren asegurar la tenencia de la tierra. Al discutir las experiencias negativas de algunos países en el proceso de reforma agraria con asistencia del mercado, proyecto del Banco Mundial, y con las actuales violaciones a los derechos humanos de quienes luchan por la tierra, Vía Campesina expresó la necesidad urgente y desesperada de hallar alternativas.

Un resultado es que expandirá y fortalecerá la Campaña Global en favor de la Reforma Agraria que se lanzó conjuntamente con las organizaciones Foodfirst Information, con sede en Alemania, y con Action Network.

Poner en práctica el compromiso con la igualdad de géneros de la Cuarta Conferencia de Vía Campesina, tuvo como antecedente la Segunda Asamblea Internacional de Mujeres. Durante los últimos cuatro años Vía Campesina ha buscado la paridad de género al restructurar y expandir su comisión de coordinación internacional, incluyendo a una mujer y a un hombre de cada una de sus regiones. Sin embargo, las delegadas a la Segunda Asamblea de Mujeres enfatizaron que tales medidas no son suficientes para lograr una paridad formal de género. Dado que la política mundial relativa a la agricultura sigue dominada por los hombres, se requiere aún mucho trabajo para garantizar que la equidad de géneros se convierta en práctica cotidiana a todos los niveles, en todos los actos y aspectos de Vía Campesina.

Hay también una aguda conciencia de la importancia de la juventud en el mantenimiento de las vibrantes culturas campesinas rurales y sus prácticas agrícolas. Para lograr incrementar la participación y la representación de los jóvenes, Vía Campesina sostuvo la Primera Asamblea Internacional de Jóvenes que reunió a 92 representantes de 35 países. La juventud inundó la reunión de imaginación, creatividad, energía, canto y baile, rompiendo así con las barreras del lenguaje. Pero su mensaje político resonó con claridad: los jóvenes quieren mantenerse en la tierra produciendo alimentos y están convencidos de que "otra agricultura es posible" y de que, a través de Vía Campesina, se organizarán internacionalmente para hacer que esto ocurra.

Desde su nacimiento en 1993, Vía Campesina experimentó una rápida expansión. Africa está ahora formalmente integrada en la octava región de Vía Campesina, que incluye organizaciones de Malí, Mozambique, Senegal, Madagascar y Sudáfrica. En su décimo primer año, Vía Campesina se vuelve más fuerte y finca raíces por toda Asia, donde vive la mayoría de los campesinos del mundo. La Cuarta Conferencia Internacional integró a 41 organizaciones más al movimiento, de las cuales más de la mitad son organizaciones campesinas asiáticas. Sin duda, la presencia de Vía Campesina en Asia se fortalecerá considerablemente en los próximos tres años debido a que el nuevo secretariado operativo de Vía Campesina tendrá su sede en Jakarta, Indonesia.

Marx predijo que los campesinos desaparecerían. Los amos de la globalización confían en que sucumban a las enormes agroindustrias comerciales. Los campesinos se rehúsan tercamente a desaparecer.

¹ Irradiación es el uso de químicos en los alimentos perecederos para que duren más tiempo en los anaqueles. La medida provoca efectos desconocidos para la salud humana que diversos analistas juzgan nocivos.

Traducción: Ramón Vera Herrera