Norberto Rivera insiste en su llamado a perdonar y olvidar el pasado

Ante la ley de Dios no hay prescripción, subraya el presidente del Episcopado

La Iglesia mantiene su demanda de que se haga justicia, afirma Felipe Arizmendi

Mientras el cardenal Norberto Rivera Carrera hizo ayer un llamado al perdón y a olvidar el pasado, al referirse a la decisión de negar las órdenes de aprehensión contra el ex presidente Luis Echeverría y 12 funcionarios por los hechos del 10 de junio de 1971, otros obispos pidieron que la ley sea pareja para todos y que este caso sirva de ejemplo para que no se vuelvan a repetir los actos de represión.

Entrevistado al final de la misa dominical en la Catedral Metropolitana, Rivera Carrera aseguró que "luego de conocer la verdad es necesario llegar al perdón y ser capaces de ver hacia el futuro". Insistió en que para alcanzar la reconciliación social es necesario "el perdón, para no quedar atrapados en el pasado".

Puntualizó que el perdón no significa "que neguemos los acontecimientos del pasado ni que se vaya en contra de la justicia y la verdad" e insistió en que es un acto de generosidad y valentía que "nos libera y permite ver hacia el futuro".

Agregó que "es al juez a quien corresponde la responsabilidad de otorgar la orden de captura" y admitió que ya se ha dado un gran paso en la independencia y autonomía del Poder Judicial, el país vive momentos que "desde hace tiempo anhelábamos, como es la independencia y autonomía del Poder Judicial".

Por su parte, el obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, dijo que en "crímenes graves", como los de la guerra sucia, la Iglesia insistirá "en que se esclarezca la verdad, que se haga justicia y sobre todo que estos casos sirvan como ejemplo para la posteridad, para que no se vuelvan a repetir".

En entrevista, el prelado se refirió también a la negativa judicial de emitir órdenes
de aprehensión contra los presuntos culpables de la matanza estudiantil de 1971 considerando que la impunidad en el caso "sería una lesión grave al estado de derecho y a la convivencia social". Añadió que sin erigirse en juez para dictaminar si es conveniente otorgar una orden de aprehensión, sí es importante conocer la verdad y castigar a los responsables. Recordó que Jesucristo enseña a perdonar con el corazón, pero reiteró que "es diferente el perdón a la impunidad". Y dijo que aún cuando penalmente no haya castigo "la historia va dando a cada quien el lugar que merece".

En León, Guanajuato, el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, José Guadalupe Martín Rábago, consideró que también deberán prescribir delitos que pesan sobre guerrilleros que "descontrolaron" el orden público en la misma época.

El purpurado declaró en entrevista que la ley debe ser pareja para todos y que si el juez desechó la acusación que pondría a disposición de la justicia al ex mandatario Luis Echeverría, lo mismo deberá ocurrir con todos los actores del jueves de Corpus.

"Si los delitos prescribieron para todos, šqué bueno!, pero daría la impresión de que los que estuvieron del otro lado no se les ha tomado en cuenta. Puede que no les guste a algunos que lo diga, pero así lo siento. Ante la ley de Dios no hay prescripción".

Puntualizó que ante la ley de Dios no existen prescripciones, "a no ser aquella persona que se arrepiente de sus pecados y pide perdón a Dios, pero no quien no se arrepiente".

Agregó que las autoridades del país deben realizar su trabajo con apego a la ley "y no dejarse llevar por sentimientos de venganza, porque una cosa es la justicia y otra la venganza: si el delito prescribió, entonces prescribe para todos los mexicanos".

LAURA POY, REPORTERA, ELIO HENRIQUEZ Y MARTIN DIEGO RODRIGUEZ, CORRESPONSALES