México D.F. Lunes 9 de agosto de 2004
Actualmente la Constitución es letra muerta, considera el jefe de Gobierno
El proceso de desafuero, ''monumento a la arbitrariedad'': López Obrador
Una monstruosidad si PRI y PAN se unieran en mi contra, señala De concretarse la destitución se terminaría con la poca credibilidad que queda en las instituciones, advierte
BERTHA TERESA RAMIREZ
El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, dijo que el proceso que se sigue para desaforarlo es un monumento a la arbitrariedad, y aseveró que ''sería una monstruosidad'' que el PRI y el PAN se unieran en su contra con el propósito de eliminarlo. Señaló que llevar a cabo su destitución terminaría con la poca credibilidad que hay en las instituciones y constituiría un fuerte golpe a la democracia, que apenas está dando los primeros pasos.
Al señalar que todo esto es un asunto realmente burdo, insistió en que incluso la fiscalía que está solicitando su desafuero por parte de la Procuraduría General de la República (PGR) ha resuelto el no ejercicio de la acción penal en otros casos similares al suyo. ''Yo no sé qué estaban pensando, no sé quién hizo esta recomendación, por qué actuaron de esta manera. No creo yo que prospere.''
Antes, interrogado sobre el apoyo de un grupo de gobernadores perredistas, encabezados por la gobernadora electa de Zacatecas, Amalia García Medina, el mandatario capitalino dijo que agradece el respaldo ''de todo corazón'' y les pidió esperar el proceso que se sigue en la Cámara de Diputados. ''Yo estoy confiado, estoy tranquilo, no creo que prospere porque es un absurdo; no cometí ningún delito, no violé la ley, y lo digo de manera franca. Si hubiese cometido un delito, una infracción, tendría yo el valor suficiente para reconocerlo y no me gusta mentir.''
De la misma forma manifestó su agradecimiento por la cadena humana que ayer organizó el Partido de la Revolución Democrática capitalino en contra del desafuero. En ese tenor agregó que todo este asunto fue fabricado para perjudicarlo, ''para hacernos a un lado con miras a 2006, pero no tiene sustento jurídico, es un asunto político, además de muy burdo'', indicó.
Más adelante, interrogado sobre las opiniones de algunos miembros del Partido de la Revolución Democrática respecto al riesgo de que ''se incendie'' el país si procede el desafuero, dijo que sobre eso no va a opinar.
Más tarde, al encabezar en la plancha del Zócalo capitalino un acto durante el cual entregó créditos para vivienda, López Obrador señaló que su proyecto es el que se encuentra plasmado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; señaló que el día que se cumplan los preceptos de la Carta Magna, que actualmente ''son letra muerta'', el país será mejor.
Por otra parte, el jefe de Gobierno dijo que programas sociales como el de apoyo para vivienda no constituyen una concesión gratuita, ''y mucho menos una dádiva, sino son un derecho establecido en la Constitución''. Sin embargo expresó que hay muchas cosas que a pesar de estar establecidas en la Carta Magna desde hace tiempo no se aplican, ''pero cuando la Constitución se lleve a la práctica las cosas tienen que mejorar en nuestro país; mejorarán cuando todos esos principios se conviertan en realidad y dejen de ser letra muerta''.
Abundó que en los preceptos constitucionales ''están consagrados los derechos a un salario justo, está consagrado el derecho a la salud, a la educación, a la vivienda; es cosa de aplicar, nada más, lo que está en la Constitución''.
''El poder no tiene sentido si no está al servicio de la gente''
En ese contexto respondió a quienes le preguntan cuál es su proyecto: ''Pues el que está en la Constitución; el que los seres humanos tengan la posibilidad de una vida justa, una vida digna; no está tan complicado. Los tecnócratas se van a estudiar al extranjero y allá nada más lavan el cerebro; luego, en vez de venir a ayudar a la gente vienen a perjudicarla, eso es todo''.
Dijo que le da gusto trabajar y ''por eso, aunque haya ataques un día sí y otro también, no perdemos el buen humor, no nos ponemos tristes, porque nos sentimos muy bien, estamos muy bien con nuestra conciencia y estamos muy bien con el prójimo''.
Agregó que todo esto le produce una gran satisfacción, ya que, indicó, no es el salario, no es el poder por el poder. El poder -agregó- no tiene sentido, no se convierte en virtud si no se pone al servicio de la gente. ''El poder por el poder es arrogancia, es prepotencia, es autoritarismo, es corrupción, fantochería.''
Concluyó que ''el verdadero poder es el que permite al servidor público poner su trabajo, su conocimiento al servicio de los demás, porque el poder tiene que ver con el humanismo, con ayudar a la gente pobre, con ayudar a la gente que más lo necesita''.
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