México D.F. Lunes 9 de agosto de 2004
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
Del Fobaproa a las gasolineras,el hábito de robar al mexicano
Inversionistas siempre quieren más ventajasa
EN LA DÉCADA DE LOS 80 un personaje del sector público financiero se convirtió en el tecnócrata perfecto. Su designación como director de tal o cual consorcio del Estado o su simple participación en "asesoría de apoyo" en cualquiera de ellas, era la notificación tácita, pero oficial, de que la empresa en turno se privatizaría. Su labor consistía en limpiar, restructurar, sanear, adelgazar... y vender.
HIGIENIZO UN BUEN número de consorcios públicos que terminaron en manos privadas y creó escuela: de entonces a la fecha se han multiplicado los tecnócratas perfectos y desde tiempos de Miguel de la Madrid -sexenio en el que tal personaje se movió como pez en el agua-, esa ha sido la estrategia de la "nueva generación" de funcionarios públicos para desmantelar la infraestructura productiva y de servicios del Estado.
A CAMBIO PROMETIAN -prometen-, se liberarían recursos de la nación para combatir el rezago social, pero éste, terco, avanza velozmente. Se sanearon empresas industriales, comerciales, financieras y de servicios del Estado que terminaron en manos privadas (buena parte de ellas rescatadas con los dineros públicos presuntamente liberados), pero faltaba la seguridad social. Y llegó su turno, aunque oficialmente se niegue (Ƒcuántas veces el gobierno ha dicho no, para terminar en un rotundo sí?).
EL RESULTADO DE EJERCICIOS anteriores ha sido desastroso, pero aún así en el capítulo pendiente ya dieron el "primer paso" (la decisión de los legisladores de "reformar" la Ley del Seguro Social), en su intento por consolidar lo que ellos llaman concepto de país: el gerencial México, sociedad anónima.
EN ELLO COINCIDE UN lector de este espacio ([email protected]), quien subraya: "Poca gente sabe las consecuencias de las privatizaciones; aunque simpatice con los trabajadores del IMSS, de la CFE, de Luz y Fuerza y de Petróleos Mexicanos, no comprende lo que representan en cuanto a pérdida de soberanía, además del menoscabo consustancial a sus derechos como mexicanos (no sólo de parte de los trabajadores al servicio de esas empresas).
"EL PROBLEMA DE LAS reformas a la Ley del Seguro Social no es sólo que dejen irresueltos los problemas financieros de la institución (y esto no se cansan de repetirlo los diputados y senadores que las apoyaron), ni que avale una posición de fuerza frente al sindicato; lo grave del asunto es que se le quiera tomar el pelo a la opinión pública, pues solamente se trata (con las transformaciones y la posterior disminución en la prestaciones del contrato colectivo de trabajo) de hacer más atractivo al IMSS a sus futuros compradores privados extranjeros. Así ocurrió en Diesel Nacional, donde los futuros compradores de la empresa pusieron como condición "abaratar" los costos del CCT y dócilmente el gobierno se dio a la tarea de concretar las liquidaciones y las mutilaciones, hasta que quedara un contrato light a gusto de las necesidades de los inversionistas.
"ESTA ES LA MISMA LOGICA perversa que se sigue en Pemex al tratar de modificar su régimen fiscal disminuyéndole los enormes impuestos que cubre, lo que le permitirá a sus futuros dueños operar con ganancias exorbitantes. No hay inversionista interesado en comprar una empresa donde se destina 60 por ciento de sus ingresos -o más- al pago de impuestos.
"ƑCUAL ES EL FONDO DE LAS 'reformas' foxistas? Vender el país al mejor postor, vender el patrimonio nacional, enajenar la riqueza social de los mexicanos. No es que la CFE no tenga recursos para poder invertir, pues las empresas que ahora generan su propia energía eléctrica han probado que no es nada costoso el procedimiento, sino que se trata de que los inversionistas encuentren un paraíso en la adquisición a precio de chatarra de las instalaciones de la empresa, para su propio beneficio".
PARAISOS ES LO QUE, precisamente, ha generado el desmantelamiento de la infraestructura productiva y de servicios propiedad de la nación, y en su afán de quitarse de encima cualquier sospecha de estatista, el gobierno ha dejado en manos privadas negocios que son verdaderas minas de oro, como puede ser el de las gasolineras, que con sus no menos de 18 mil millones de pesos de ingresos anuales -sólo por venta de Magna y Premium- ahora manejan empresarios no siempre pulcros.
EN ESTE SENTIDO, POR EL "redescubrimiento" del fraude conocido como "ordeña inteligente" (litros de a 800, 600 o menos mililitros) en gasolineras que operan con el aval de Petróleos Mexicanos y las denuncias que sobre el particular han hecho la Profeco y la Secretaría de Seguridad Pública, Pemex-Refinación decidió iniciar "el procedimiento de rescisión de contratos de franquicias a aquellas estaciones de servicio que, luego de los muestreos realizados en los últimos días por la SSP, hayan incurrido en irregularidades en el suministro de gasolina a los consumidores".
SE HABIAN TARDADO, porque como se comentó días atrás en este espacio cuando menos desde 1996 tal "ordeña" se había detectado y nada se había hecho para evitar el cotidiano atraco a los consumidores.
UN TRABAJADOR DE Pemex-Refinación describe a México SA parte del negocio: "Soy operador de auto tanque y abastezco de combustible a las estaciones de servicio. Los precios que Pemex da a los gasolineros son: 113 mil 923 pesos por pipa (20 mil litros) de Magna; 134 mil 648 pesos por pipa de Premium; 96 mil 968 pesos por pipa de diesel; el margen de ganancia es 8.26, 8.17 y 5.36 por ciento, respectivamente; sólo de gasolinas en la República se despachan alrededor de 5 mil pipas por día. Además, la mayoría de los trabajadores de las estaciones no reciben sueldo, son propineros, y tienen la obligación de vender cierto número de aceites y aditivos durante su jornada y, si no, pagarlos y llevárselos; por eso insisten tanto.
"TODAVIA DE LAS GANANCIAS tan buenas, de evitar los salarios del personal y de la venta segura de aceites y aditivos, se dan el lujo de robarnos con sus litros incompletos; que hagan algo para que ya no nos roben, todo mundo ya nos roba: los banqueros (Fobaproa, IPAB), en el súper con los cambios, los políticos con sus prestaciones abundantes y jugosas, y además en las estaciones de servicio".
Las rebanadas del pastel:
MÉXICO TIENE UN MODELO económico del primer mundo (Fox dixit), pero con resultados del tercero. [email protected]
|