Héctor Zamora inaugura la exposición-intervención Paracaidista. Av. Revolución 1608 bis

Concretada, la invasión al Carrillo Gil

Vivirá tres meses en la construcción; el proyecto no estuvo exento de trabas burocráticas

ARTURO JIMENEZ

Al menos medio centenar de espectadores, sobre todo jóvenes, asistió ayer al mediodía a la inauguración de la exposición-intervención Paracaidista. Av. Revolución 1608 bis, una casa construida por el artista Héctor Zamora como un parásito adherido a la parte alta de los enormes muros del Museo de Arte Carrillo Gil.

Luego de la inauguración a cargo de Carlos Ashida, director del museo, esos asistentes fueron los primeros visitantes, formados y en pequeños grupos, en treparse a la casa marginal del colono invasor Zamora, la cual parece flotar sobre las aceras de avenida Revolución y Altavista. (La Jornada, 25/08/04 y 26/08/04)

Como suele suceder al concluirse la construcción de una vivienda, en la que el artista vivirá tres meses, la inauguración se convirtió en un festejo acompañado de tacos de barbacoa, consomé, cervezas y aguas de frutas, con la presencia discreta de varios trabajadores que colaboraron con Zamora, artista, diseñador gráfico e investigador.

Con la inauguración fue abierta también una pequeña exposición que documenta el proceso de planeación y construcción de ese proyecto de geometría estructural, así como los trámites y obstáculos burocráticos que debieron vencerse ante los institutos nacionales de Bellas Artes y de Antropología e Historia, y la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de esta ciudad.

En tres monitores se cuenta la historia visual de las etapas constructivas. Una pantalla de computadora ofrece consultas de imagen y otros datos. Se exponen también, planos, apuntes, fotos de seguimiento, cédulas informativas.

Emancipación arquitectónica

"El trabajo de Héctor Zamora es un ejemplo de la emancipación de ciertos criterios arquitectónicos, que han llegado a convertirse en un medio de lenguaje apto para la transmisión de ideas y conceptos", señala el curador Gonzalo Ortega.

Este artista, continúa Ortega, ha encontrado una prolífica fuente de inspiración en el diseño de estructuras ligeras. "Valiéndose de múltiples medios, tal y como sucede en diversas propuestas del arte contemporáneo, Zamora es capaz de agrupar una visión nueva y objetiva sobre el diseño, la distribución y la funcionalidad del espacio".

Zamora ha hecho otras intervenciones arquitectónicas, no tan ambiciosas como la actual pero también interesantes. Una fue en 2000, cuando realizóa=360 r/R en La torre de los vientos, frente a Perisur. Otra, el año pasado, titulada PNEU y desarrollada en la galería Garash.

"Desde el punto de vista artístico Paracaidistas es muy coherente. Es una pieza que tiene muchas derivaciones y desde su planteamiento están prefigurados muchos de los elementos formales con los que el artista trabajó", dijo Ashida en entrevista.

''Los materiales (barras de metal ligeras, láminas de cartón acanaladas, tablas) tienen por sí mismos unas características formales y colorísticas que responden al contexto al que hace referencia el título de la pieza'', concluyó.