MEXICO, SA

Carlos Fernández Vega

Las cuentas alegres del foxismo

Las cifras indican que en materia de crecimiento económico "lo mejor" no está por venir

NO SE ESPERABA mayor cosa de su cuarta cita en San Lázaro, que como las tres anteriores resultó fatua y con ''datos duros'', tan sólidos como una esponja, pero si algo ha de rescatarse de la ocasión es la candidez con la que el inquilino de Los Pinos notificó a la nación que el futuro venturoso por él prometido en campaña está, ahora sí, a la vuelta de la esquina.

''šLO MEJOR ESTA por venir!'', sentenció el presidente Vicente Fox casi al concluir su intervención, y lo subrayó como si el del miércoles hubiera sido su primer informe de gobierno y no el cuarto. Cándido, y no otra cosa, por aventurar una oferta de esa naturaleza cuando ha consumido dos terceras partes del tiempo reglamentario, según el reloj constitucional, sin haber cumplido con las originales, con la credibilidad en el suelo, y justo ahora que comienza a perfilarse su retiro al rancho San Cristóbal -con o sin- y no su triunfal arribo a Los Pinos.

EN MATERIA DE crecimiento económico, por ejemplo, obvio es que "lo mejor" no está por venir, porque aun en el supuesto de que la economía mexicana lograra significativos incrementos en el tiempo que a Vicente Fox le resta al frente de la administración pública, el balance sexenal sería por demás raquítico, el más frágil de los últimos cinco gobiernos, o si se prefiere de los últimos 30 años, exceptuando el de Miguel de la Madrid, que es joya de otra colección.

EN SU INFORME, el presidente Fox destacó: "Nuestro país tiene bases firmes para consolidar el crecimiento y aprovechar el nuevo dinamismo de la economía mundial. Hoy, gracias al esfuerzo de todas y de todos los mexicanos, estamos de regreso en el camino del crecimiento económico. En el segundo trimestre de este año, el producto interno bruto creció 3.9 por ciento, en junio la actividad económica se expandió 5.1 por ciento y esperamos terminar el año 2004 con un incremento de 4 por ciento. Esto es menos de lo que México necesita, de lo que queremos y por lo que estamos trabajando. Sin embargo, el crecimiento significa nuevas empresas que crean nuevos empleos. En los primeros siete meses del año, 281 mil trabajadores se incorporaron al sector formal, con derechos y con prestaciones. También se crearon fuentes de trabajo e ingreso en el autoempleo y en proyectos productivos. Necesitamos avanzar más deprisa en la generación de nuevas fuentes de trabajo y desarrollo de emprendedores. De ninguna manera nos satisfacen los 400 mil nuevos empleos formales que se estiman para este año".

LO QUE NO hizo en cuatro años, difícilmente -por ser cautos con el término- lo logrará en los dos restantes, pero la candidez lo lleva a sostener que ''šlo mejor está por venir!''

ENTONCES, SI SE comparte el optimismo presidencial, un primer escenario económico positivo -siempre con el porvenir en mente- debe dar por hecho que en 2004 el producto interno bruto crecerá 4 por ciento y que en los siguientes dos años ese porcentaje se mantendrá. De ser correcta dicha proyección, la tasa promedio anual de crecimiento económico durante el sexenio del "cambio" habrá sido de tan sólo 2.3 por ciento.

UN SEGUNDO ESCENARIO sería el siguiente: se mantiene 4 por ciento de avance al cierre del presente año y se incrementa la tasa de crecimiento a 5 por ciento en 2005 y a 6 por ciento en 2006, lo que para los ojos del guanajuatense sería maravilloso. El resultado es igual de raquítico, pues el promedio de incremento anual durante la administración del "cambio" sería de 2.8 por ciento.

EL TERCER ESCENARIO supondría ese terco 4 por ciento para el presente año, más tasas de 6 y 7 por ciento para 2005 y 2006. Resultado: "datos duros indican un avance extraordinario", diría el inquilino de Los Pinos, pero en los hechos el incremento promedio anual del producto interno bruto sería de 3.15 por ciento.

EN EL EXCESO, y para demostrar que el modelo económico que se sigue en México ("que se aplica y es exitoso en todo el mundo, salvo deshonrosas excepciones"-Fox dixit-) es un joya invaluable, el cuarto escenario implicaría ese mismo 4 por ciento en 2004, más una tasa de 7 por ciento para 2005 y otro tanto para 2006. Resultado: el PIB habría crecido a una tasa promedio anual de 3.3 por ciento.

SOLO PARA REFRESCAR la memoria: en el sexenio de José López Portillo el producto interno bruto creció a una tasa promedio anual de 6.55 por ciento; en el de Miguel de la Madrid el indicador fue de 0.34 por ciento, en el de Carlos Salinas de Gortari de 3.91 por ciento y en el de Ernesto Zedillo de 3.5 por ciento. Cuatro sexenios en los que, con diversos grados de intensidad, la crisis y sus zarpazos llegaron para quedarse.

HOY QUE NO hay tales efectos (Fox dixit) y que la fortaleza macroeconómica es verdaderamente maravillosa (ídem), la economía crecería, en el mejor de los escenarios, a un ritmo menor que en el zedillato, aunque el perenne optimismo del presidente Fox podría llevarlo a presumir que durante su administración el país creció a un ritmo mucho mayor que el registrado en tiempos de Miguel de la Madrid.

QUE LEJANO SE ve aquel crecimiento económico de 7 por ciento anual con su millón 350 mil nuevos empleos generados, porque en el mejor de los casos -incluso en un caso extraordinario- el país crecería a menos de la mitad de lo originalmente comprometido por el guanajuatense, quien ahora asegura que ''lo mejor está por venir''. Tal vez llegará, pero con él no, indudablemente.

EN VIA DE mientras, el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, ya presume en el extranjero que en 2005 el producto interno bruto mexicano reportará un crecimiento cercano al 4 por ciento, una proporción idéntica a la que -dice- registrará en este 2004. El funcionario participa en el encuentro de ministros de Finanzas del Foro de Cooperación del Asia Pacífico

Hasta el momento, desde que se sentó en la silla de secretario de Hacienda, los pronósticos de Gil Díaz en materia de crecimiento económico han sido por demás errados. Fallaron en 2001, en 2002 y en 2003, pero espera que los correspondientes a 2004 por fin no estén equivocados.

Las rebanadas del pastel:

FRASES CÉLEBRES DEL cuarto informe: con balas de goma (de plástico, versión Derbez) "nuestros paisanos saben que cuentan con el gobierno de México para defender sus derechos y su dignidad"... Feliz fin de semana.

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