México D.F. Miércoles 8 de septiembre de 2004
Priístas abren nuevo frente contra el GDF
Diputados priístas pretenden ahora destituir al jefe del Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, porque no atendió a tiempo la solicitud del presidente de la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones, para que garantizara con la fuerza pública de la ciudad el resguardo del Palacio Legislativo de San Lázaro, el primero de septiembre pasado.
María Esther Sherman Leaño informó que el martes pasado, en una reunión en Gobernación, un grupo de legisladores le advirtió al subsecretario de Seguridad Pública capitalino, Gabriel Regino, que en caso de que el GDF se negara a enviar policías a resguardar San Lázaro, se le aplicaría la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos y la Orgánica del Congreso de la Unión, y su destitución del cargo sería "inmediata".
Asimismo, informó que el mismo grupo de diputados acudió personalmente a las oficinas del gobierno de la ciudad para entregar la solicitud por escrito que envió a López Obrador el presidente de la mesa, y que funcionarios capitalinos "se negaban a recibirla con el argumento de que no contaban con el sello respectivo".
Refirió que debieron amagar con presentarse acompañados de un notario público que diera fe de que, efectivamente, no encontraban el sello. "Entonces sí lo encontraron y dieron por recibido el documento", comentó.
La solicitud de Beltrones fue directa al demandar que "se brinde la protección debida a las instalaciones del Poder Legislativo, como seguridad, vialidad y servicios públicos requeridos para la realización" de la sesión de Congreso General.
El martes pasado por la tarde, en una entrevista radiofónica, Beltrones expresó su molestia porque el gobierno de la ciudad se había limitado a ofrecer que los diputados y senadores serían trasladados en Metro hasta la estación Candelaria, para que desde ahí ingresaran al Palacio Legislativo, que fue tomado por el Estado Mayor Presidencial, el Ejército y la Policía Federal Preventiva. ENRIQUE MENDEZ Y ROBERTO GARDUÑO
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