México D.F. Jueves 23 de septiembre de 2004
Tras el resultado habrá reacomodos de
las fuerzas políticas, coinciden partidos locales
Incertidumbre en BCS ante la próxima contienda
del sol azteca para elegir candidatos
El Partido del Trabajo y el Verde Ecologista de México
se disponen a establecer alianzas
ARTURO N. RAMOS CORRESPONSAL
La Paz, BC, 22 de septiembre. El proceso electoral
que se efectuará el 6 de febrero para renovar gubernatura y cinco
presidencias municipales, se encuentra inmerso entre señalamientos
y pugnas internas de cada partido político, así como en la
incertidumbre de lo que pasará en la contienda del Partido de la
Revolución Democrática del próximo domingo, que definirá
en mucho el escenario político del estado.
El
partido en el poder, el PRD y los opositores con mayor presencia, como
el PRI y el PAN, viven con intensidad las confrontaciones y tensiones de
grupos y aspirantes a una candidatura.
El Partido del Trabajo y el Verde Ecologista de México
se disponen a establecer alianzas que les permitan mantenerse entre el
electorado y negociar posiciones en los gobiernos municipales.
La atención se centra en la elección interna
del PRD -que se hará mediante consulta a la base-, ya que de ese
resultado dependerá el reacomodo de fuerzas, debido a que existen
versiones de que algunos precandidatos perdedores dejarán las filas
perredistas para irse a contender por otro partido.
Los síntomas más recientes se dieron hace
apenas unos días, cuando tres de los cuatro precandidatos perredistas
a la gubernatura: Víctor Manuel Guluarte Castro, alcalde con licencia
de La Paz; Rodimiro Amaya Téllez y Ricardo Gerardo Higuera, senadores
con licencia, denunciaron en rueda de prensa conjunta, un supuesto apoyo
del gobernador Leonel Cota Montaño en favor de Narciso Agúndez
Montaño, diputado federal con licencia.
Guluarte Castro aseguró que Agúndez Montaño
es familiar del gobernador Cota Montaño, lo cual en reiteradas ocasiones
ha sido negado por ambos, argumentando que los apellidos Cota y Montaño
son comunes en Baja California Sur. "Hasta en los otros partidos hay Cotas
y Montaños", le reviró el gobernador.
En tanto, Rodimiro Amaya denunció que se avecina
una "elección de Estado" en el PRD, puesto que hay evidencias claras
de ello, como cuando el candidato a la presidencia municipal de Comondú,
Marcos Covarrubias Villaseñor, dijo que haría lo que el gobernador
decidiera, y a los pocos días apareció en una foto de un
periódico levantándole la mano a Narciso Agúndez.
Gerardo
Higuera dijo que una prueba de que el mandatario estatal apoya a Narciso
Agúndez está en que Juventino Cota Montaño, hermano
del gobernador, es el coordinador de la precampaña de Narciso Agúndez.
Sin embargo, el presidente estatal del sol azteca, Omar
Castro Cota, señaló que no existen pruebas ni indicios de
que el gobernador tenga metidas las manos en el proceso, y sostuvo que
el capital político que el mandatario estatal representa para la
elección es por la obra que ha realizado en el estado.
En la oposición las cosas no andan tan bien. En
el Partido Acción Nacional dos grupos se disputan la candidatura
a gobernador: el ala de los tradicionales, donde confluyen gente de viejo
cuño, profesionistas y académicos, y el ala de los empresarios.
Alfredo Martínez Córdova, ex priísta que fue alcalde
de Comondú hace 11 años, estará disputando la candidatura
a Luis Coppola Jofroy, hotelero y pionero del desarrollo turístico
de Los Cabos.
Esto ha llevado a algunos enfrentamientos verbales, que
han estado a punto de llegar a los golpes.
El día del registro de los aspirantes, seguidores
del grupo empresarial -que tiene al frente del Comité Estatal panista
a Carlos Rodríguez Buchelli- impidieron el acceso a simpatizantes
de Martínez Córdova bajo el argumento de que estaban expulsados
del partido, mientras que los señalados dicen que su caso está
en revisión.
Ahí también se rumorea que habrá
escisiones que propiciarán un voto de castigo a favor del PRD, principalmente
si se da lo que todo mundo anticipa, que uno de los precandidatos perdedores
del sol azteca pasaría a ser el abanderado panista a la gubernatura.
En el Partido Revolucionario Institucional son tres las
cartas fuertes: Antonio Manríquez Guluarte, quien perdió
la contienda por la gubernatura en 1999 con el actual gobernador Leonel
Cota; el senador José Carlos Cota Osuna, el alcalde de Mulegé,
Marco Antonio Núñez Rosas, y el ex dirigente estatal del
PRI, Miguel Vega Pérez.
Aquí ya ha habido conflictos, porque Cota Osuna
ha denunciado que el presidente del Comité Directivo Estatal, Enrique
Martini, apoya a Manríquez Guluarte.
Pero el problema principal para el PRI se avecina desde
afuera, ya que se estima difícil que por sí solo pueda vencer
al partido en el gobierno, y para ello requiere de establecer alianzas,
y una posibilidad es con el Partido Verde Ecologista, el cual está
entre los posibles institutos políticos para recibir a un precandidato
perdedor del PRD.
También se sabe que el tricolor busca coaligarse
con el Partido del Trabajo, el cual ya tiene precandidato, según
anunció su dirigencia local.
Se trata del ex alcalde de La Paz, Alfredo Porras, perredista
hasta hace un año, Alfredo Porras Domínguez, quien hubiera
sido el rival a vencer en la contienda interna del PRD, de no ser por su
estrecha relación con el grupo priísta del ex gobernador
Guillermo Mercado Romero, actualmente en proceso penal por presunto desvío
de recursos públicos, y a quien se atribuye ser el principal impulsor
de Porras Domínguez, lo cual forzó su salida del PRD.
Tal situación agravaría las cosas en el
PRI, porque Porras Domínguez es un fuerte rival y se estima difícil
que con tres precandidatos de distintos partidos pueda haber un acuerdo
para que dos declinen en favor de uno.
Así las cosas, mucho dependerá de lo que
se defina en la contienda interna del PRD el domingo 26, porque curiosamente
ninguno de los otros partidos ha programado elección de candidato
antes de esa fecha.
|