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México D.F. Viernes 1 de octubre de 2004
RUTA SONORA
Patricia Peñaloza
Björk, Housecat, Salsology
COMO UN RETORNO a su natal Islandia, así
como al espíritu de lo primitivo, inmediato y silvestre, la extravagante
e icónica Björk ofrece el que quizá sea su álbum
más impresionante hasta ahora, Medúlla (2004),
en el que la voz humana, su materia prima fundamental, el sello distintivo
que la ha hecho única en su clase, es su centro de gravedad, su
juego y retruécano, su universo todo, envuelto en un halo que invita
a vivir un "neopaganismo" en el que, dice ella a The Independent,
"se deje sentir la esencia humana, lo ancestral; ese algo proveniente de
las raíces; esa parte visceral, pasional, profunda y oscura del
hombre". Completaría a la revista Uncut: "volver a ese momento
anterior a las religiones, los nacionalismos y el terrorismo de George
W. Bush".
 ATINADAMENTE
AMBICIOSO (QUE no pretencioso), Medúlla recrea efectivamente
tales sensaciones oriundas, orgánicas, para fusionarlas con un sonido
actual, de avanzada, gracias a las mezclas y programaciones "electrónicas"
finales que, a partir de las voces-beats provenientes de ella y un tropel
de invitados, efectuaron Björk misma y su colaborador de años,
Mark Bell, así como Valgeir Sigursson (del
grupo islandés Múm) y el electro-dueto de San Francisco,
Matmos. Así, como ha dicho la treintaysieteañera de
Reykjavik, si algo tiene de bueno el estrellato, es que "si quieres tener
en tu disco al músico más recóndito de la India tocando
un exótico instrumento, lo podrás tener". De este modo, es
en éste su quinto disco "de estudio" (lo fue grabando en una laptop,
viajando por Islas Canarias, Brasil, Nueva York y Londres) que pudo reunir
no sólo a los coros Londinés e Islandés, sino a personalidades
como los cantantes Mike Patton (Faith no more, Fantomas, Mr.
Bungle) y Robert Wyatt; a los caja-de-ritmo-humanos Rahzel
(de The Roots) y el japonés Dokaka; a la cantante
canadiense de Inuit, Tanya Tagaq; al productor brasileño
Arto Lindsay, entre otros músicos.
ASIMISMO, INCLUYE UNA pieza de la nonagenaria compositora
clásica-contemporánea islandesa Jòrunn Vidar
(Vökuró, "vigilia" ); musicalizado, un poema de E.E.
Cummings (Sonnets/Unrealities XI) , así como Oceania,
el tema compuesto para la apertura de los Juegos Olímpicos Atenas
2004, con letra del poeta islandés Sjón Sigursson,
quien ha colaborado con ella desde su disco Homogenic (1997).
CON TANTO INGREDIENTE de peso, tres años
de intenso trabajo, el proceso de gestación de su segunda hija Isadòra
("estuve más en contacto con mi cuerpo, de ahí el volver
a lo esencial, lo natural"), y el amor instalado más que nunca en
su vida (ya estabilizada con su pareja, el artista plástico Matthew
Barney), el resultado es un cúmulo de explosivas emociones,
luminosas entrañas, y caminos sónicos por los que Björk
no había andado. A diferencia del íntimo, austero y taciturno
Vespertine (2000), la señora Gudmundsdöttir retoma
el vuelo épico y el ímpetu influido por los corales clásicos
que tuvo en el soundtrack de Dancer in the dark (de
Lars Von Trier), el imprescindible Selma Songs (2001),
así como la grandilocuencia de su aclamado Homogenic, para
dar un disco equilibrado, donde aunque los sonidos son profusos, tampoco
atiborran. Un álbum celebratorio, lleno de vida, en el que su madurez
composicional, arreglística y melódica brilla en todo su
esplendor, del mismo modo en que el cuerpo de una mujer rebosa de belleza
cuando acaba de alumbrar.
Y ES QUE cuando concibió que sus composiciones
estaban sonando con más intensidad cuando les quitó beats
y demás eufonías, y visualizó que la voz humana sería
aquí su eje, se puso como regla, explica a The Independent,
que "no debía sonar a Manhattan Transfer ni a lo ya hecho
en los 80 por Bobby Mc Ferrin". Y vaya que lo logra. Así,
las posibles cuerdas son sustituidas por un sinfín de voces procesadas;
las percusiones, asombrosamente emitidas por Rahzel, se suceden cual una
metralla de notas, o como contrabajo. Trombones emulados, gruñiditos
animales, gemidos, voces que se estiran como si fueran de chicle, armonizaciones
plenas; paisajes que remiten desde una fiesta tribal hasta un bosque frío,
una cueva, el oscuro fondo del mar, una noche estrellada. Puede escucharse
un sobrio tema a capella (Show me forgiveness); dos de título
islandés, aunque de pura emisión vocal sin palabras (Öll
Birtan, "toda la luz", y Mivikudags, "miércoles");
un piano discreto en dos tracks; temas cuasi-pop como Who is
it? (suena a canción de Peter Gabriel con programaciones
de Aphex Twin) o The triumph of a heart, la única
tipo "bailable". Impresionante es Where is the line?, que según
ella, le remite a Bohemian Rhapsody de Queen, con el humor
que ello implica, mas con un ataque posmoderno de voces y procesos de total
vanguardia. Dulzura con The pleasure is mine; alegría materna
en Mouth's cradle; misterio con Submarine y Ancestors;
tranquilidad nocturna con Desired constellation...
EN FIN, UN álbum hermoso, fino, excepcional,
que requerirá de la atención devota del escucha, pues aunque
su proyección habita el mundo del pop, Björk se halla más
lejos que nunca de lo comercialmente "accesible" y más cerca de
la universalidad sonora.
Bonham, Holden
VIERNES 1: 1. Felix da Housecat en
el Acanto!!! Este revolucionario productor posmo-electro le dará
con todo. Lago Mayor, 2ª sección de Chapultepec). 22 horas,
210 pesos.
2. SALSOLOGY. 100% Latin-drum&bass.
Pachangón para presentar el EP de mismo nombre, del sello Ataraxia.
Con influencia de Los Fania All Stars, Fruko y sus Tesos y los
Latin Brothers, la fusión entre d&b, funk, soul y salsa
de los 70, levantará el polvo del Salón Baraimas. Pincharán:
su productor Smoke; Salsoul y Sabotaje Sistema Sonoro.
Orquesta sorpresa en vivo. Filomeno Mata 7 y 5 de Mayo, Centro. 21 horas,
50 pesos (con CD, 110 pesos).
SABADO 2: 1. De San Francisco, Jerry Bonham,
pionero del progressive. También de allá, Ric Masters;
de aquí, Okram & Milo. Acanto (Lago Mayor, 2ª sección
de Chapultepec). 22 horas, 210 pesos.
2. JAMES HOLDEN, joven propuesta del prog-house
británico, en Costa Club. También: Carlos Valadie, Parlange,
Belatti y Gunther. Mazarik 393, 2º piso. 22 horas, 200 pesos
3. EVOLUTION. AHUNER, Viva Hate, Vict, Soda,
Zegna, entre otros, le picarán al
tech, synth + future pop. Fuzz Club (Bolívar 44, Centro).
22 horas, 50 pesos.
4. NOCHE ELECTRONICA con
Digi+Gabo, Acid Kit, Wrinkler y Brindesi. VDMás (Calzada La
Viga 667). 22 horas, 80 pesos.
5. NO NOS creas. Post-house
con Audirac vs Plug. Además, DJ Evil, Glu y Selftronic.
Tandem Pub (Tigris y Nazas, Cuauhtémoc). 21 horas, 40 pesos.
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