Fue aplaudido por los más poderosos empresarios por ser el impulsor del IVA

México quiere precios del petróleo más bajos, afirma Gil Díaz en EU

Ofreció un informe oficial sobre avances en restructurar deuda y reformar Pemex

JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES

Washington y Nueva York, 3 de octubre. El secretario mexicano de Hacienda, Francisco Gil Díaz, declaró hoy ante líderes de las empresas financieras más poderosas del mundo que México espera que el precio de petróleo en los mercados mundiales se reduzca en un futuro próximo y ofreció un informe sobre los avances de su gobierno en restructurar deuda, reformar Petróleos Mexicanos (Pemex) y limitar el gasto público. Señaló además que México está hoy más ligado que nunca a Estados Unidos en el aspecto económico.

El secretario de Hacienda se ha convertido en una especie de héroe en las reuniones anuales del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por sus siglas en inglés), la asociación de las 340 empresas financieras más grandes del mundo, ya que es uno de los pocos líderes financieros de las grandes economías en vías de desarrollo que, plenamente y sin críticas, abraza las recetas económicas del mundo industrializado.

De hecho, México fue sólo uno de tres países en vías de desarrollo invitados a hacer una presentación ante la reunión del IIF en Washington este fin de semana (los otros dos fueron Irak (con el gobernador del banco central) y China (con el subgobernador de su banco central). El IIF es una de las instancias financieras más poderosas del mundo y, de hecho, durante las presentaciones de esta mañana un orador dijo, bromeando, que la declaración de la misión de esta institución podría llevarlos a ''tomar el control del mundo''.

En la reunión de esta mañana celebrada en un hotel céntrico cerca de la sede del Fondo Monetario Internacional, el presidente de Citicorp, William Rodees, presentó al secretario Gil Díaz como ''el arquitecto e impulsor del muy famoso impuesto al valor agregado'', y destacó que ''en verdad él es la persona que hizo que la gente pagara sus impuestos en México''.

Después del aplauso, Gil Díaz generó algunas risas cuando respondió: ''Sólo desearía que en México tuviéramos a gente que pagara sus impuestos''.

El secretario comenzó su ponencia al señalar que la economía mexicana está hoy día más vinculada con la estadunidense que en cualquier momento en la historia. ''Cuando el índice industrial de Estados Unidos sube, sube el índice mexicano... y lo hace sin retraso'', indicó Gil Díaz. ''Hay una correlación de 99 por ciento ahora (fue de 50 por ciento en 1994). Así, pueden ver los efectos del TLC''.

Gil Díaz procedió a ofrecer a su público de banqueros y ejecutivos empresariales un informe en inglés sobre la economía mexicana, con uso de transparencias y power point, detallando las tasas de interés disponibles sobre la deuda soberana, el crecimiento del sector manufacturero y la restructuración de la deuda publica hacia más instrumentos denominados en pesos con plazos de maduración más largos.

Al reconocer que el alza de los precios de petróleo había contribuido de manera considerable al panorama financiero positivo de México, Gil Díaz aseguró que el gobierno está empleando estos fondos para invertir en Pemex, disminuir deuda y desarrollar otros proyectos financieros sanos. El gasto público, subrayó, se está reduciendo y el gobierno de Vicente Fox espera bajarlo más el próximo año.

Fue en este contexto que el secretario dijo que México ''espera que los precios de petróleo no se mantendrán en los niveles actuales''. A la vez, concedió que ''tenemos que hacer reformas que aún no hemos podido promover a través del Congreso para mejorar la productividad y el crecimiento''.

En un breve intercambio con periodistas al concluir su presentación, se le preguntó a Gil Díaz cuál de estas reformas pendientes es la más importante. ''Yo creo que la más importante es la de energía'', respondió, y agregó que las necesidades de mayor capital en ese sector hacen muy necesaria una reforma. ''Cuba permite contratos de riesgo en petróleo'', destacó con obvia frustración a causa de la renuencia en México de permitir que empresas extranjeras firmen contratos con Pemex que permiten ofrecer ganancias ajustadas a los resultados de los proyectos.

Además, destacó que el sector energético mexicano registró el más bajo desempeño con respecto a otras áreas productivas y, sobre los precios internacionales del petróleo, dijo que insistirá ante el Congreso en la necesidad de mantener una situación prudente ante la volatilidad de los mercados.