Conserva la concepción neoliberal de dejar al mercado la planeación: Alberto Gómez

Critica experto iniciativa foxista de planeación agropecuaria

MATILDE PEREZ U.

El proyecto de iniciativa de ley de planeación agropecuaria, forestal, pesquera y seguridad alimentaria que presentó Presidencia de la República a la Cámara de Diputados atenta contra la soberanía alimentaria y considera a la planeación como una técnica administrativa y no como una política orientada al desarrollo de los campesinos, evaluó Alberto Gómez Flores, de la comisión ejecutiva de la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas.

"Son pocos los aspectos novedosos que aporta dicho proyecto y no cambia la concepción neoliberal de dejar al mercado la planeación de la producción agropecuaria", abundó el dirigente campesino. En la reunión con diputados de las comisiones de Agricultura y de Presupuesto, Gómez Flores asentó que con dicha propuesta se facilita el rentismo y la concentración de la tierra como "nuevo" modelo de producción rural, además se establecen las bases para crear "un banco de agua y de tierras" para ofrecerlos al mejor postor.

Es evidente que el gobierno no pretende cambiar la política hacia el campo, sino favorecer la agricultura por contrato. "Está apostando a esquemas de concentración de los apoyos en manos de intermediarios y comerciantes; se pretenden repetir los apoyos (rescates) otorgados a los propietarios de los ingenios y no a los cañeros, a empresas como Monsanto y no a los algodoneros, a los industriales de la harina y no a los productores de maíz y trigo."

Dicha iniciativa, abundó Gómez Flores, pretende cambiar los esquemas de asignación de los recursos, los cuales serán entregados a los productores más competitivos, productivos y rentables, dejando fuera a la mayoría de los ejidatarios y pequeños propietarios; "es una propuesta en defensa de una política excluyente".

Por su parte, las ocho organizaciones que conforman el Movimiento el campo no aguanta más realizarán hoy una jornada en defensa de la soberanía alimentaria que incluye manifestaciones pacíficas frente a las instalaciones de Cargill y Nestlé, en las cuales se pronunciarán en contra de las importaciones de maíz transgénico y del "pésimo" café asiático. Por la tarde desplegarán plantones ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y en la residencia oficial de Los Pinos.