Lula "lloró" cuando supo de los sobornos, afirma parlamentario brasileño
Renuncia el tesorero del Partido de los Trabajadores por denuncias de corrupción
Ampliar la imagen Brasile�se manifiestan en Sao Paulo contra la corrupci�rente a la sede del Partido de los Trabajadores del presidente Lula FOTO Ap Foto: Ap
Sao Paulo, 5 de julio. Presionado por graves denuncias de corrupción, el Partido de los Trabajadores (PT), del presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, prosiguió este martes la depuración de su más alta dirigencia con la renuncia del tesorero Delubio Soares, tras la dimisión del secretario general Silvio Pereira.
Soares presentó la renuncia en una reunión de emergencia en Sao Paulo de los 21 miembros de la ejecutiva del PT.
El tesorero pidió ser apartado del cargo hasta que concluyan las investigaciones de las denuncias en el Congreso, y aseguró que no ha "transgredido los principios éticos de la práctica política".
En una reunión que la dirección del PT celebró hoy en su sede de Sao Paulo ningún dirigente se pronunció sobre la salida de Soares y Pereira, ni de los próximos pasos de ese partido político, cuyo presidente, José Genoino, está también en el centro de todas las denuncias.
La dimisión de Soares fue notificada mediante breve nota de prensa. Por ese mismo medio, el PT comunicó que convocó otra reunión de la dirección nacional para el próximo sábado.
La dirección del organismo discutirá "la propuesta de resolución sobre el momento político y la reorganización de la ejecutiva", indicó el partido.
La dirigencia del PT enfrenta acusaciones de haber pagado mensualidades a parlamentarios aliados, a cambio de apoyo político al gobierno.
Esas denuncias, investigadas por el Congreso, fueron hechas por el diputado Roberto Jefferson (del Partido Trabalhista Brasileño, aliado del gobierno), quien afirmó que los pagos se realizaban utilizando al publicista Marcos Valerio.
El PT niega esas acusaciones, pero las presiones sobre sus más altos dirigentes arreciaron después que el fin de semana se reveló que el tesorero y Genoino suscribieron un millonario préstamo avalado por Valerio, que a su vez tiene millonarios contratos con empresas públicas.
Las denuncias de corrupción ya le costaron el cargo al ex todopoderoso ministro jefe de gabinete José Dirceu, quien renunció el pasado 16 de junio, el que también se declaró inocente.
El PT enfrenta "la mayor crisis en sus 25 años de historia", declaró el secretario de Movilización de ese partido político, Francisco Campos.
Buena parte de los miembros de la ejecutiva mostraron sentimientos encontrados de si Genoino debe mantenerse al frente del partido, y la oposición no parece dispuesta a dar descanso.
El senador Antonio Carlos Magalhaes, del derechista Partido del Frente Liberal, declaró hoy que el PT "ha perdido un gángster, un ladrón", en alusión a Soares, pero dijo que el país no puede olvidar "que Lula sabía todo y nada hizo".
En este sentido, el propio Jefferson indicó que cuando el mandatario brasileño se enteró los sobornos "pararon", pero, según Magalhaes, el presidente nada hizo para castigar a los responsables.
Jefferson, en declaraciones al periódico argentino La Nación, indicó que el mandatario brasileño "lloró y se sintió traicionado" por los sobornos. "El presidente supo en enero todos los detalles, cuando yo se lo conté. Se sorprendió y comenzó a llorar. Se sintió traicionado".
Añadió que Lula da Silva le pidió precisión sobre los sobornos que el PT entregó a legisladores aliados, y "fue como si le hubiera dado una puñalada en el pecho. Su reacción fue la de alguien absolutamente sorprendido, conmocionado".
En el Congreso continúan las investigaciones sobre todos los casos denunciados, mientras 20 parlamentarios del PT divulgaron un comunicado en que exigen que sean separados de sus cargos todos los dirigentes involucrados.
El texto de los parlamentarios exige además la destitución de los miembros del gabinete envueltos directa o indirectamente en las denuncias de sobornos o en otros asuntos de corrupción.
La nota parece aludir así al ministro de Previsión Social, Romero Jucá, acusado de obtener créditos públicos fraudulentos, y al presidente del Banco Central, Henrique Meirelles, procesado por presunto fraude fiscal.
Por último, para oxigenar su gobierno ante las denuncias, trascendió que Lula decidió esta noche nombrar en su gobierno a tres miembros del centrista Partido del Movimiento Democrático Brasileño: Helio Costa, Saraiva Felipe y Silas Rondeau.