UNICACH: tamal de cuchunuc, platillo de gran aporte nutricional
Tuxtla Gutierrez, Chis. El tamal chiapaneco, por su variedad, constituye uno de los platillos más distintivos de la entidad. Dependiendo de la región donde se prepare, adquiere diferentes sabores y consistencias. Hay tamales de iguana, de armadillo guisado, de mariscos y de diversos pescados. También están los que se elaboran con flores y hierbas comestibles, como el jacuané, nacapitu, cuchunuc, putzatzé, yumimujú, entre otros. Cada región de Chiapas tiene su especialidad. En la zona de la cultura zoque, ubicada en el centro, la gastronomía se basa en el uso de plantas, leguminosas, frutas, semillas, raíces y especias que varían según la época. Durante la primavera, el árbol conocido como mataratón ofrece su flor llamada cuchunuc, nombre zoque. Con ellas se preparan tamales y otros platillos. A este árbol es común encontrarlo como cerca viva o silvestre. Destaca cuando está en floración profusa, por sus flores de color blanco-rosado y casi completamente sin hojas. Según un estudio de la directora de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH), Vidalma del Rosario Bezares Sarmiento, esta flor ofrece un importante aporte de fibra, vitaminas y minerales. Este platillo sólo puede adquirirse en restaurantes especializados o en el mercado de la capital de Chiapas.
Angeles Mariscal, corresponsal