Asunto vial, no bélico
Almirantes y marines
Banamex: bailes de salón
Aniversario priísta
Luis Pazos se quita la máscara
Han salido 50 mil millones de la reserva
Seguirá vigente la tenencia
Especulación, un barril sin fondo
Grito de plañideras contra tope a tasas de interés bancarias
Riesgos de la lectura
Superstición de Feuchtwanger
Algo sobre el doncel
Indie-O Fest
yer, en el Centro de Readaptación Social de Ciudad Juárez, Chihuahua, ocurrió un violento enfrentamiento –originado, al parecer, por una riña entre bandas de reos rivales– que dejó como saldo, según información del gobierno de la entidad, una veintena de muertos y al menos seis heridos, tres de ellos de gravedad.
Policías y taxistas, coludidos en contra de un estudiante, afirman
l jueves 26 de febrero del presente año, aproximadamente a las 23 horas, fue detenido Pedro Luna Pintor, estudiante de la licenciatura en sociología de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa, con matrícula 205331327, después de haber acudido a una convivencia estudiantil. Saliendo del lugar se dirigió hacia la avenida Rojo Gómez, donde abordó un taxi y pidió que lo llevara a su domicilio. El taxista, de nombre Óscar Reyes, tomó un rumbo distinto y se dirigió a la colonia Santa María Aztahuacán, donde, en presencia de un retén policiaco, acusó a Pedro Luna Pintor de robo con agresiones verbales.
arios de quienes escribimos en los periódicos somos profesores y/o investigadores universitarios. Los sueldos máximos en las instituciones de educación superior son, para los profesores e investigadores de tiempo completo (prestaciones al margen), de alrededor de 15 mil 800 pesos más la prima de antigüedad (véase la página en Internet de transparencia de la UNAM). Y con esos sueldos, más los honorarios que pagan los periódicos por artículo, en general mantenemos nuestra independencia y normalmente, hasta donde se sabe, no hay casos de soborno ni de venta de la pluma al mejor postor. Nadie puede garantizar que los académicos universitarios seamos incorruptibles, pero tendrá que reconocerse que a lo largo de los años muy pocos profesores o investigadores han sido acusados de ser comprados. No somos ángeles, ciertamente, pero por contraste con la corrupción que priva en el país, parecemos ser excepcionales en este punto.
l cerrar la puerta al acceso ciudadano a las averiguaciones previas, la reciente reforma al artículo 16 del Código Federal de Procedimientos Penales violenta nuestro derecho a la información y sume al Ministerio Público en un pozo de opacidad. Además de atropellar el principio de máxima publicidad
incluido en el artículo sexto constitucional, la reforma también violenta el artículo 20 de la Carta Magna que señala que el proceso penal se debe regir por el principio de publicidad. Asimismo, el nuevo texto legal es contrario a diversos instrumentos regionales e internacionales de defensa de los derechos humanos signados y ratificados por el Estado mexicano.
diferencia de los coquetos, en lugar de quitarse la edad el PRI se empeña en parecer más viejo de lo que es. En sentido estricto este partido nació el 18 de enero de 1946, a ocho años del fallido Partido de la Revolución Mexicana (PRM) que vio la luz por decreto presidencial en 1938, y a 17 años del Partido Nacional Revolucionario (PNR) que se formó en marzo de 1929 para dar una solución de largo plazo al problema siempre riesgoso de la sucesión en el poder. Así que en 2009 el PRI cumple 63 años y no 80, como dicen muchos, incluso priístas, que deben pensar todavía, como buenos gerontócratas chinos, cubanos y soviéticos, que la edad es un atributo del buen gobernante.
a es un lugar común describir el mundo sindical como el último reducto del viejo autoritarismo. La democracia, se dice, se detiene a las puertas del sindicato, con todas las implicaciones políticas y sociales que pudieran derivarse. Pero los críticos de la nueva hornada liberal no acaban de explicarnos cómo y por qué esos líderes anacrónicos sobreviven, sin que los aires de la alternancia democrática alteren su presencia. Al contrario, doña Esther se renueva a la sombra del presidente Calderón y al inefable Gamboa Pascoe en plena decrepitud se le concede el derecho a la genuflexión, un gesto de sabor añejo pero muy actual. Una vez más, las alianzas pragmáticas del poder se superponen a los discursos falsamente renovadores y la simulación florece en el reino de los gesticuladores. La ética exige poner fin al monopolio
sindical, aunque en este nuevo mantra del democratismo sin adjetivos subsisten algunos supuestos objetables.
uego de haber logrado que se aprobara el programa para la recuperación y la reinversión en la economía estadunidense, Obama ha planteado los términos de su siguiente acción: la batalla por el presupuesto federal. En los lineamientos generales del presupuesto para 2010 enviados al Congreso por un monto de 3.5 billones de dólares, equivalentes a 25 por ciento del PIB de ese país en 2009, se formulan los pilares básicos de su planteo: un fondo de 634 mil millones para reformar el sistema de salud; inversión de 150 mil millones en el desarrollo de energías alternativas; 250 mil millones para los bancos; incrementos a las tasas impositivas para los ricos hasta llegar a 39.6 por ciento de sus ingresos; reducción del déficit fiscal en el mediano plazo a seis puntos del PIB.
a huelga general y manifestaciones callejeras estremecen a Guadalupe y Martinica, departamentos franceses de ultramar
, eufemismo que designa a las que han sido dependencias de la metrópoli desde la conquista. Iniciada en Guadalupe (500 mil habitantes) el 20 de enero y en Martinica (400 mil habitantes) el 5 de febrero, los movimientos se organizan en torno a una amplia conjunción de sindicatos y asociaciones ciudadanas en protesta contra la crisis social, agravada por las políticas neoliberales de París. El costo de la vida en las islas es mucho más alto que en Francia y el desempleo altísimo, sobre todo entre los jóvenes. Las protestas exigen un aumento del salario mínimo, la rebaja de los precios de la canasta básica y de los servicios, derecho al trabajo, a la educación y la salud, pero tras semanas de dilatadas negociaciones con las autoridades y de renuencia de los patronos a ceder, han tomado ya un cariz político. Afloran el sentimiento de independencia y la disputa por el poder político entre la mayoría de la población de origen africano y los llamados béké, exigua minoría blanca descendiente de franceses que controla la economía y el gobierno desde la época colonial. Si a veces suele olvidarse en América Latina que Haití es fundador de la lucha por nuestra primera independencia, con más frecuencia ocurre respecto a Guadalupe y Martinica como parte de la historia y cultura que nos une. Allí, aunque aplastados en sus comienzos, se produjeron grandes levantamientos de esclavos a finales del siglo XVIII, al unísono que en Haití. Ambos territorios poseen también una fecunda historia de luchas obreras y sociales desde el siglo XX. El malestar se ha extendido a las otras dependencias francesas: Guayana, en Sudamérica, y la isla Reunión, cercana a la costa africana del Pacífico sur, donde está convocada la huelga para el 5 de marzo.
l proyecto teatral Azteca Teatro, si hijo de la televisora del mismo nombre, aparece como mucho más refinado que su empresa madre. El director Raúl Quintanilla realizó con Fresas en invierno de la dramaturga quebequense Evelyne de Chenalière –en traducción de Mauricio García Lozano– una inteligente maniobra que nada tiene que ver con la baja calidad que la empresa de TV ofrece en las pantallas chicas y al mismo tiempo no sería rechazado por el sector de clase media alta que pudiera ver su programación televisiva. Por su estructura y por su montaje escénico, Fresas en invierno tiene una cierta sofisticación que evade la rutinaria clasificación de teatro comercial como teatro sin valores y, al mismo tiempo, su contenido es tan inocuo socialmente como mera comedia de enredos (la diatriba de Roberto contra las universidades privadas y los alumnos que acoge se sale del contexto general de la obra) que puede ser aceptado por todos, porque el tema amoroso es un tema prevaleciente en la literatura dramática.
epasando recortes de periódicos de ésos que uno guarda porque para algo los necesita, el corazón lo sabe, me encontré con la foto de Juan Gelman en estricto traje de etiqueta inclinándose con gracia frente a una potestad desconocida. Él da la cara en la foto, y enfrente, lógico, debe hallarse quien recibe su reverencia. Caramba, me dije, ¿ante quién se inclina Juan Gelman tan galante, perfecto caballero serio y sentimental, vestido de gala? No podía ser más que ante la más alta de las potestades, la augusta potestad de la poesía.