La propuesta coreográfica de Arkanum es una especie de metáfora del azar y sus verdades.

Se trata de una búsqueda que quiere calar profundo, ver desde otro lado la extensión de una vastedad que se abre generosa para la creación artística sin ningún artificio, yendo al fondo de la danza misma, renunciando a un discurso para construir otro, explica Cecilia Lugo, directora de la compañía Contempodanza.

La agrupación regresa a los escenarios con la obra Arkanum, que presenta hoy, mañana sábado y el domingo en el Teatro Legaria, dentro del ciclo La danza y sus formas, jornadas en movimiento.

En entrevista con La Jornada, la directora de la compañía, quien en sus obras explora el tema del ser humano, señala que es difícil entender la realidad más allá de nosotros. El arte nace de esta parte íntima de cada creador. Cada ser humano tiene un discurso diferente frente a un mismo tema, porque depende de cómo se percibe.

El montaje coreográfico, bajo la dirección de Lugo, evoca una aventura deseada y temida por descubrir parajes ocultos del alma, un intento por desentrañar misterios y desanudar enigmas que habitan en forma de símbolos en las arcas del inconsciente colectivo.

A partir de la lectura del texto El castillo de los caminos cruzados, de Ítalo Calvino, la coreógrafa decidió crear su propia narración y usó como tema los símbolos de los siete arcanos mayores del Tarot: El Colgado, El Enamorado, El Diablo, El Sol, La Rueda de la Fortuna, El Mago y La Templanza.

La selección de estas cartas da forma a la maquinaria narrativa de Arkanum, que reúne artistas de la danza, la plástica, la música y de la escena.

Mapa del inconsciente colectivo

Para Cecilia Lugo cualquier tema puede detonar una obra coreográfica y en el caso de Arkanum aborda aspectos internos del ser humano a partir del Tarot, que investiga hace más de 30 años.

Es algo más que un sistema adivinatorio, es un mapa del inconsciente colectivo. El azar nos muestra ciertas cartas y su posición, pero éstas revelan un estado de cosas. Es una herramienta de ayuda para la conciencia, nos posibilita comprender dónde estamos y hacia dónde nos dirigimos.

Explica que “la danza sólo necesita del ser humano y de un cuerpo entrenado. No creo que el discurso de este arte se haya agotado, pero estoy abierta a la interdisciplina y me gusta trabajar con otros creadores, como en Arkanum, en el que participa el artista Alberto Castro Leñero, quien diseñó la escenografía”.

Con Arkanum, Contempodanza consolida su discurso coreográfico vinculado con las pulsiones más íntimas del ser humano.

La obra es resultado del apoyo económico otorgado a Contempodanza por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, dentro del programa México en Escena-Fonca segunda emisión, en coproducción con la Dirección de Danza de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Arkanum se presentar hoy a las 20 horas; mañana a las 19 horas y el domingo a las 18 horas, en el Teatro Legaria (calzada Legaria, esquina glorieta Allende, colonia Pensil).