La Secretaría de Salud (Ssa) invertirá 800 millones de pesos en la construcción de la nueva sede del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre), el cual contará con un laboratorio de bioseguridad nivel 3 para la detección temprana de enfermedades graves, asociadas al bioterrorismo o a fenómenos como la eventual pandemia de influenza, anunció el secretario de Salud, José Angel Córdova Villalobos.

Dijo que un laboratorio de este tipo es una necesidad que se había retrasado por diversas razones, pero en el que ya se han invertido 95 millones de pesos y este año se sumarán 300 millones para la obra que, de acuerdo con lo planeado, estará concluida a finales de 2010. El resto de los recursos se ocuparán en la misma construcción y en el equipamiento.

En entrevista concedida luego de la ceremonia conmemorativa del 70 aniversario del Indre, el funcionario recordó que México está comprometido con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para que a más tardar en 72 horas después de cualquier caso de fiebre de origen desconocido, el sistema nacional de salud pueda dar información del caso y tomar las medidas que sean necesarias para evitar daños a la salud.

También comentó que si bien el bioterrorismo es uno de los factores que han motivado el reforzamiento de los mecanismos de seguridad, también es muy importante la circulación diaria de millones de personas entre diferentes continentes, lo que favorece la transportación de gérmenes en unas cuantas horas y, a la larga, la propagación de enfermedades tan graves como la influenza.

Destacó que en caso de ocurrir una pandemia de influenza, de acuerdo con los expertos, 25 por ciento de la población podría resultar afectada, principalmente en los países en desarrollo, cuyos sistemas de salud todavía son deficientes y en los que prevalecen condiciones inadecuadas de vivienda. Por eso la importancia de contar con infraestructura de alta seguridad, como la que tendrá el Indre, apuntó.