Comentan afirmación del Papa sobre el sida

on una indignación apenas matizada por la costumbre de este tipo de declaraciones, hemos leído el pronunciamiento de Benedicto XVI que pretende hacer del condón un instrumento de diseminación de la pandemia. ¡Y lo hace en África!, el continente más afligido por el sida. Es allí donde aboga en favor de un retorno acelerado a la dorada Edad Media donde la castidad triunfe sobre los flagelos de las epidemias, sin el molesto intermediario del saber científico. Es parte del embate de la alta jerarquía católica en contra de lo que ya no podrá hacer retroceder: el aborto y los derechos reproductivos, el apoyo del gobierno de Obama a la investigación con células madre (factor clave para el tratamiento de enfermedades crónico-degenerativas), y los derechos de las minorías sexuales. En la utopía fundamentalista, los enfermos de sida serán algún día apenas un detalle, como lo fueron los judíos exterminados en Auschwitz para el ultraderechista Jean Marie Le Pen en Francia, o para cualquier otro negacionista del Holocausto protegido por el Vaticano.

ras la histórica victoria electoral del Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional (FMLN), Mauricio Funes, presidente electo de El Salvador, anunció que muy pronto se entrevistaría con Lula en Brasil. Si hay un líder a nivel latinoamericano al que he admirado, y sobre todo al que he visto con especial atención sus programas económicos para mantener la estabilidad macroeconómica de Brasil, es Lula, dijo a la prensa. Estas palabras, unidas al llamado a firmar un nuevo acuerdo de paz, de reconciliación del país consigo mismo, parecieron, a los ojos de los observadores, la confirmación de que la victoria de la izquierda no significaba, como pregonaban sus adversarios, el deslizamiento del FMLN hacia la esfera de influencia de Hugo Chávez, convertido por obra de la propaganda negra en el nuevo fantasma de la reacción latinoamericana.

inalmente, el Presidente de la República envió al Senado su propuesta para la designación de los cuatro consejeros profesionales que, de acuerdo con la nueva Ley de Petróleos Mexicanos, se incorporarán a su consejo de administración. La comisión correspondiente de ese cuerpo legislativo entrevistó a los profesionales propuestos, para la aprobación prevista en la propia ley.

a elección de Mauricio Funes a la presidencia de El Salvador es una resonante victoria del gran movimiento social nucleado en torno al postergado anhelo mayoritario de justicia social y libertad. Su gran mérito consistió en doblar el brazo al búnker derechista-oligárquico que detenta el poder en El Salvador desde el siglo XIX y ha constituido uno de los regímenes más reaccionarios, corruptos y represivos de América Latina. El mismo que ahogó en sangre el levantamiento campesino de 1932 y ha incumplido lo sustantivo, social y político de los acuerdos de paz. Cabe recordar que los rubricó al no poder derrotar la rebelión armada de los 80 no obstante la masiva ayuda militar que recibió de Estados Unidos. Integrado por los ocho grupos empresariales que controlan el poder real, intentó cerrarle el paso al candidato popular echando mano a cuantiosos recursos financieros, públicos y privados, y a la coerción económica y política apoyada en una feroz campaña de terrorismo mediático. Pero como afirmó Funes al proclamar su victoria, esta vez la esperanza venció al miedo.