Laboristas se pliegan a Netanyahu; tendrán la cartera de Defensa
Miércoles 25 de marzo de 2009, p. 35
Jerusalén, 24 de marzo. Al menos 32 policías y manifestantes resultaron heridos en enfrentamientos registrados este martes durante una marcha de la ultraderecha israelí en el mayor pueblo árabe de Israel, Um el Fahem, para exigir a sus habitantes lealtad al Estado.
La marcha de la derecha radical provocó la ira de los árabes israelíes, a los que se sumaron activistas de izquierda de Israel para evitar la entrada de los manifestantes a Um el Fahem, mientras lanzaban piedras a las fuerzas de seguridad, que respondieron con gases lacrimógenos ensordecedores y con chorros de agua.
Raed Salah, líder del movimiento islámico, acusó a la ultraderecha israelí de intentar legitimar el traslado
fuera del país de los árabes nacidos en Israel. Debemos luchar para quedarnos aquí y tenemos que impedir
que la ultraderecha entre a Um el Fahem”.
Tras los enfrentamientos, se decretó una huelga general en la ciudad, donde habitan un millón 200 mil descendientes de los palestinos que se quedaron en su tierra después de la creación del Estado de Israel, en 1948, y que son considerados por la ultraderecha israelí como traidores
que apoyan a los palestinos contra el Estado del cual son ciudadanos.
En tanto, el Partido Laborista aprobó con 680 votos en favor frente a 507 en contra su entrada a la coalición de gobierno del derechista Benjamin Netanyahu, con quien su líder Ehud Barak firmó un acuerdo vago en cuanto al proceso de paz con los palestinos.
Barak declaró que con esta decisión su partido será un contrapeso
y evitará que el gobierno sea exclusivamente de derecha, luego de que el líder del Likud logró el apoyo del ultranacionalista Israel Beiteinu y el ultraortodoxo Shass, con lo cual cuenta con 66 de los 120 diputados.
El acuerdo firmado con Netanyahu concede a los dirigentes laboristas cinco carteras ministeriales en el futuro gobierno israelí, entre ellas la de Defensa, que corresponde a Barak.
Sin embargo, el acuerdo es muy vago respecto a la reactivación del proceso de paz, pues no menciona una solución basada en la creación de dos estados.