Roma, 31 de marzo. La crisis económica internacional ha provocado que las remesas que envían los emigrantes mexicanos que trabajan en Estados Unidos a sus familias en México hayan caído entre 8 y 10 por ciento, informó el martes el secretario mexicano de Desarrollo Social, Ernesto Cordero.

Esa reducción por ahora no ha provocado efectos negativos gracias a la devaluación del dólar, por lo cual se reciben más pesos que antes, expresó a periodistas en el último día del G-8 Social Ampliado.

El funcionario mexicano indicó, sin embargo, que esa compensación por la baja del precio del dólar durará poco tiempo debido al aumento de la inflación.

Cordero aclaró que la crisis económica que afecta a Estados Unidos no ha provocado un regreso a su país de los emigrantes mexicanos. Se quedarán ahí, probablemente a la espera que pase la crisis, agregó.

En la reunión, que empezó el domingo en Roma, participaron los ministros de Trabajo de los países del G-8 (Italia, Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Japón, Rusia y Estados Unidos), a la cual fueron invitados representantes de países con economías emergentes como China, Egipto, Sudáfrica, México, India y Brasil.

Cordero reconoció que la crisis podría tener efectos negativos en la lucha de México contra el narcotráfico, por una disminución de los recursos y porque es más fácil reclutar mano de obra de parte de las organizaciones criminales.

El secretario mexicano aseguró que en estos momentos hay que apoyar a las empresas generadoras de empleo, a las pequeñas y medianas, no ya sólo a las grandes, que son las que generan la mayor cantidad de empleos en América Latina, y esto automáticamente va en apoyo de los trabajadores.

En la cumbre de ministros de Trabajo del G-8 ampliada a los países emergentes que concluye este martes en Roma, Cordero Arroyo abogó a favor de medidas para fortalecer la empresas que generan empleo.

Hay que apoyar el trabajo, apoyar a las empresas generadoras de empleo, a las pequeñas y medianas y no sólo a las grandes, porque son las que generan la mayor cantidad de empleos en América Latina y fortalecer a la vez el esquema de protección social, aseguró.

México, entre los países con economías emergentes invitados a la cumbre junto con Brasil, Sudáfrica y Egipto, ha tomado las medidas correctas para hacer frente al aumento del desempleo en todo el mundo por la recesión económica.

La recesión llegó a todo el mundo. México ha tomado medidas oportunas, no nos agarró de sorpresa, comentó Cordero Arroyo en una charla con periodistas, al margen de la cumbre.

Destacó que la tasa de desocupación en México, que mide también la economía informal, es básicamente de 5 por ciento, y afecta sobre todo a los trabajadores formales.

Estamos avanzando por el camino y por la ruta correcta. Nos vamos satisfechos por la manera con la que se llevó la reunión, abierta y democrática. Se escuchó la situación de los países emergentes, subrayó.