El presidente guatemalteco rechaza la imputación y pide ayuda a EU para investigar el caso
Simpatizantes y detractores del gobernante se manifiestan; la policía impide enfrentamientos
Miércoles 13 de mayo de 2009, p. 22
Guatemala, 12 de mayo. Cientos de guatemaltecos salieron a las calles este martes para protestar en contra del gobierno por el asesinato del abogado Rodrigo Rosenberg, mientras otros lo hicieron para apoyar al presidente Álvaro Colom, acusado por el jurista, en un video póstumo, de haber ordenado su muerte.
La policía impidió que ambos grupos se enfrentaran cerca de la casa presidencial, donde Colom negó responsabilidad en el homicidio de Rosenberg, quien en un video afirmó que iba a ser asesinado por orden del mandatario y de su esposa Sandra Torres.
Las imágenes fueron difundidas ayer, un día después que el abogado fue ultimado a tiros en esta capital cuando circulaba en bicicleta en la exclusiva zona 14.
La Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú, se unió a las voces que exigen investigar el crimen con absoluta independencia del sistema de administración de justicia
, mientras la oposición exigió la renuncia del mandatario a fin de garantizar una investigación clara.
Lamentablemente, si usted está en este momento oyendo este mensaje es porque fui asesinado por el señor presidente Álvaro Colom
, dijo Rosenberg en el video, de unos 20 minutos. El abogado además acusa a Colom, su esposa, y su secretario, Gustavo Alejos, de encubrir operaciones de lavado de dinero.
La razón de por qué estoy muerto
es porque hasta el último momento fui abogado del señor Khalil Musa y su hija Marjorie Musa
, dijo Rosenberg.
Se refería al empresario Musa asesinado a balazos hace tres semanas, y quien estaba por revelar esquemas para desvío de fondos del gobierno supuestamente para financiar negocios de narcotráfico en el banco Banrural, según Rosenberg.
En la grabación el abogado asegura que deja a la justicia todas las pruebas de su denuncia, y acusa al secretario de la presidencia, Gustavo Alejos, de amenazarlo con que él se iba a encargar de que yo no siguiera hablando
sobre los Musa.
Colom negó que sea un asesino o narcotraficante
y rechazó las acusaciones de Rosenberg, cuya muerte, dijo, es utilizada por políticos oportunistas y conspiradores de tradición ligados con el crimen organizado, para confundir a la opinión pública y atacar a las autoridades para crear el rompimiento institucional
.
Colom, que recibió el respaldo de unos 250 de los 331 alcaldes del país, dijo que ya pidió ayuda exterior para esclarecer el asesinato, especialmente de Estados Unidos, pero la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala advirtió de obstáculos para resolver el asesinato del jurista.