La Cámara de Diputados acordó ayer con la Secretaría de Hacienda mantener, al menos hasta diciembre próximo, el precio del litro de leche que se compra a productores en 4.20 pesos por litro, por conducto de Leche Industrializada Conasupo (Liconsa), lo que implicará un costo de 95 millones de pesos para el gobierno federal.

Con ello, dijo el presidente de la Comisión de Agricultura, Héctor Padilla, se beneficiará a los pequeños productores de leche, a quienes se les dará certidumbre para producir y comercializar en el segundo semestre del año. Ningún producto complementario o sustituto tiene la calidad proteica de la leche auténtica, y este mercado está descuidado, dijo luego de una reunión entre legisladores, productores y representantes de Liconsa en San Lázaro.

Antes, en entrevista, el presidente del Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche, Álvaro González Muñoz, denunció que el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa privilegia a los grandes industriales, especialmente a las trasnacionales, en detrimento de los productores nacionales.

Desde 2003 se autorizó la norma 155, que permite simular productos puros que no lo son; ésto permite la venta de fórmulas lácteas, elaboradas en su mayoría con sueros, que son desperdicios de la industria quesera de los países ricos, y en México se utilizan para darlo de tomar a los consumidores, declaró.

Polémica por importaciones

Sostuvo que la preferencia por las importaciones de ese tipo de productos, que favorecen a los industriales y a los especuladores, ponen en una situación de quiebra a los ganaderos mexicanos, por lo cual demandaron condiciones justas en la comercialización de la leche.

Para ello se necesita, refirió, un precio aceptable del litro de leche que se vende al gobierno federal, porque de esta actividad dependen más de 1.5 millones de empleos y que se mantenga la actividad de más de 200 mil productores.

Exigimos un precio que permita la subsistencia de este mercado y que no se importe más de lo necesario para cubrir la demanda, además de actuar con energía contra los adulteradores que defraudan al consumidor con productos chatarra.

El director de Liconsa, Jesús Galván Muñoz, sostuvo que la paraestatal no puede comprar más leche de la que se requiere para satisfacer la demanda del mercado interno debido a que tiene un límite en el número de beneficiarios. Refirió que Liconsa compra a 4 mil 500 productores, de 250 mil que conforman el sector lechero, por lo que no puede solucionar un problema de este tamaño, además de que el incremento en la producción se empatará con una caída en la demanda, explicable porque en los próximos dos meses se iniciará el periodo vacacional en las escuelas, por lo que el consumo bajará y eso provoca estos problemas de comercialización.

Por ejemplo, dijo, en las tres semanas en que prevaleció la contingencia por la influenza cayó en un 2 por ciento el consumo de leche que vende Liconsa.