Al menos 15 trabajadores eventuales del Hospital Hidalgo, adscrito al Instituto de Salud del Estado de Aguascalientes (ISEA), se manifestaron frente a las oficinas del director del nosocomio, Gerónimo Aguayo Leitte, para exigir una de las 74 plazas que la Federación autorizó hace dos semanas, pues 53 médicos, enfermeras y camilleros tienen entre siete y 10 años de antigüedad y no han sido beneficiados con plazas estatales, ni por segundo año consecutivo, con las provenientes del nivel central.

La enfermera Diana Contreras, quien desde hace 10 años firma, contratos laborales eventuales cada cinco meses, señaló: Es una traición, el director Aguayo Leitte ya nos había prometido las bases; ya están desde hace 15 días y las retiene, no es justo.

Iván Leija, médico con siete años de antigüedad, comentó: A lo mejor por hacer esta queja nos corren, o mejor dicho, ya no nos renuevan el contrato, pues sólo falta que el director firme unos papeles para que las plazas se nos otorguen, pero como tiene miedo de que la gente que ya tiene base estatal se le inconforme, pues las va a dejar así.

Ellos y otros 13 inconformes coincidieron en que no se vale, aquí uno está dejando su vida y éstos no nos valoran, dijeron que nos iban a atender pero nos traen vuelta y vuelta.

Luego de esperar cerca de 30 minutos, una secretaria indicó a los manifestantes que Aguayo Leitte los recibiría más tarde, lo que no sucedió; sin embargo, Armando Ramírez Loza, subdirector del Hospital Hidalgo –ubicado en la capital del estado– corrió a los inconformes, así como a los representantes de los medios.

Empleados del sector salud de Veracruz demandan 7 mil plazas

Cubriéndose con máscaras que representaban los rostros del gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, y del secretario de Salud estatal, Manuel Lila de Arce, trabajadores del sector salud de la entidad caminaron simulando un cortejo fúnebre, cargando un monigote de papel con la figura de una enfermera y le prendieron fuego en la plaza Sebastián Lerdo de Tejada de la ciudad de Jalapa, frente a las oficinas del mandatario estatal.

Aseguraron que la manifestación fue un anticipo de que uno de los empleados se inmole si no se les otorgan 7 mil 190 plazas, así como la homologación de salarios que el gobernante prometió en enero de 2008.

Enfermeros y enfermeras de hospitales del estado cumplieron 22 días en plantón frente a las oficinas del Ejecutivo estatal, y negaron que sean parte de un golpeteo electoral contra Herrera Beltrán.

En respuesta a la petición de plazas y mejor salario, dijeron, las autoridades municipales de Jalapa han abierto procesos penales por la realización de marchas y bloqueos viales, mientras personal de la Subsecretaría de Gobierno ha amenazado con desalojarlos violentamente.

Luego de incinerar al monigote de papel, una de las enfermeras –quien no quiso dar su nombre– advirtió que se inmolará como hace un año lo hizo el dirigente popoluca Ramiro Guillén Tapia, en la misma plazoleta.

El gobernador sólo escucha cuando alguien muere, y si se necesita que alguien se queme para oírnos, pues seré yo, gritó la trabajadora del sector salud, quien fue paseada en hombros por sus compañeros.