La utilización de la figura presidencial en la campaña electoral panista fue validada por el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) durante un debate en el que se afianzó la partidización del desempeño de la mayoría de los consejeros para apuntalar las posturas del PAN o del PRI.

Con el voto del consejero presidente, Leonardo Valdés, se aprobó el dictamen que exoneró de sanción al PAN por las alusiones que en los mensajes se hacen al combate al crimen organizado y a la inseguridad, que en su decir encabeza Felipe Calderón.

Con base en los nuevos criterios aprobados en días pasados por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), el PRI impugnó los promocionales donde aparecen la taekwondoísta Iridia Salazar y el luchador Místico, en los que hablan en favor de las acciones presidenciales.

Inamovibles las posturas de los bloques de consejeros que se inclinan por posiciones panistas o priístas, los votos de Valdés y Alfredo Figueroa decantaron de nueva cuenta el debate con una votación prefigurada.

En este contexto, el priísta Sebastián Lerdo de Tejada acusó al blanquiazul de alentar un neopresidencialismo panista que pone en riesgo la institución presidencial, que se supone gobierna para todos. Tras aludir a los criterios del TEPJF, subrayó que en los mensajes del PAN lo que vemos es un descaro completo, la desfachatez absoluta para usar programas de gobierno y la figura del jefe del Ejecutivo como promotores del voto.

Ante ello, Lerdo de Tejada emplazó a los consejeros a dejar claro de qué lado están: del abuso ilegal de la referencia explícita del Presidente o de la democracia y sus principios. Al mismo tiempo, insistió en exigir a Calderón que saque las manos del proceso electoral.

La respuesta panista fue en el mismo tono. Señaló: el PRI no tiene campaña, no sabe hacer campaña, no tiene argumentos para convencer a los ciudadanos, por lo que reiteradamente viene a buscar censuras y silencios.

Recordó algunas acciones de destacados priístas en violación abierta a una actuación democrática, como en el caso del gobernador de Veracruz, Fidel Herrera, sorprendido dando instrucciones a los priístas “sobre cómo ser un buen mapache”.

El debate fue intenso entre los consejeros, quienes hablaron en pro y en contra de la aplicación de los criterios del TEPJF. Francisco Guerrero hizo una larga intervención; subrayó que la inclusión de menciones al Presidente sería válida siempre y cuando no afectara la libertad del voto, que debe estar libre de coacción, presiones y amenazas.

Se menciona la necesidad de apoyar al Presidente para que continúe el combate a las drogas y el narcotráfico, lo cual se logra votando por el PAN, ya que de no hacerlo podría interpretarse, según el mensaje, como dejar que la droga llegue a los niños.

Con esta postura –defendida por el PRI– coincidieron los consejeros Marco Antonio Baños, Marco Antonio Gómez Alcántar y Virgilio Andrade, quienes apuntaron que de avalar esta propaganda se estaría validando la injerencia del Presidente en los comicios.

En contrario, el consejero Benito Nacif diferenció la injerencia presidencial en la campaña de las alusiones a Calderón por el PAN, cuando está en juego el respaldo de ese partido al gobernante emanado de sus filas. Subrayó que el jefe del Ejecutivo no debe intervenir abiertamente en la campaña, pero no es el caso de los promocionales impugnados por el PRI, ya que se trata de una propaganda donde se menciona al Presidente y sus políticas, y las defiende el blanquiazul.

A juicio de Valdés, tampoco puede desprenderse de los promocionales que haya un activismo deliberado de Calderón en la contienda. A su vez, Figueroa consideró que la inducción es un ejercicio legal. La propaganda se caracteriza por la persuasión, indicó, y sostuvo que hay otros mensajes donde se habla de que el país estaría mejor con otro presidente o que la política económica del cambio no está funcionando, lo cual fue considerado por el consejero como parte de un debate democrático.

Al final, con el voto en favor de Valdés, Figueroa, Nacif, Arturo Sánchez y Macarita Elizondo se exoneró al PAN en este caso.