El colorido libro de 104 páginas con las propuestas de la población joven del país sólo fue recibido directamente por los presidentes del PRI y de Convergencia, Beatriz Paredes y Luis Maldonado, respectivamente. El resto de los líderes partidistas desairó el acto organizado por el Instituto Federal Electoral (IFE) y decidió enviar a representantes.

Ante ellos, un grupo de jóvenes, procedentes de todo el país, advirtió acerca del desempleo que campea en este sector de la población, problemática que redunda, invariablemente, en un intempestivo abandono de los estudios y conduce a la migración forzada, como única alternativa de desarrollo.

Además, mostraron su inconformidad por la abundancia de discursos y promesas para los jóvenes, a quienes los partidos ven sólo como un campo fértil para la obtención de votos, pero no consultan directamente para la definición de políticas públicas.

Miguel Gómez, un joven procedente de Colima, tomó la palabra fuera del programa, para pedir que el cúmulo de propuestas entregadas a los dirigentes y representantes partidistas no se queden en el olvido, pero sobre todo que a este sector se le tome en cuenta.

“A cualquier representante le gustaría ser la primera fuerza política del país, tener el carro completo. Si siguen con esto, si toman en cuenta las propuestas que les damos, les aseguramos que la gente va a volver a confiar en todos los partidos políticos”, indicó Miguel Gómez al mostrarles el libro Agenda juvenil 2009, entregado a los partidos minutos antes.

Luego pidió que levantaran la mano aquellos representantes partidistas que estén dispuestos a empeñar su palabra y llevar a la práctica las propuestas. Todos levantaron la mano, a excepción de la dirigente priísta, quien dijo que para dar su palabra primero tendría que leer el referido libro, elaborado en foros regionales organizados por el IFE.

De esos encuentros locales –con la participación de mil 51 jóvenes, según el organismo– fueron elegidos uno por cada entidad para que viajaran a la capital del país, con cargo al IFE, para encontrarse directamente con los líderes partidistas.

El consejero presidente del organismo, Leonardo Valdés, aprovechó el encuentro para llamarlos a votar, aunque los jóvenes procedentes de todo el país, así como estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana, sólo reaccionaron efusivamente cuando el vicepresidente del Partido Social Demócrata (PSD), Luciano Pascoe, les habló acerca de sus derechos para vivir una sexualidad libre, relajada, feliz, aventurera, segura e informada.

Los asistentes rompieron el silencio, los discursos políticos y aplaudieron.

“Necesitamos –agregó Pascoe– que los partidos sepan decir orgasmo, condón, hablar de todas esas cosas que son la realidad de lo que ustedes están viviendo”.

El discurso sobre la libertad de enamorarse de un hombre o de una mujer y de que las mujeres decidan con libertad, sin temor penal o moral, el momento en que quieren ser madres, puso eufóricos a los muchachos, quienes se levantaron de su asiento.

Aunque las ideas anteriores forman parte de la plataforma electoral del PSD, en esta ocasión no se escucharon los comentarios de algunos de los presentes en el auditorio del IFE diciendo es pura propaganda, en referencia a los discursos de otros líderes partidistas que incluyeron una cascada de diagnósticos y promesas para este sector de la población de entre 15 y 24 años, para cuando inicie la próxima legislatura.