El Secretariado Internacional Cristiano de Solidaridad con los Pueblos de América Latina (Sicsal) urgió al gobierno de Felipe Calderón a aportar todas las pruebas que están en su poder para esclarecer y actuar en consecuencia contra quien resulte responsable por la presunta desaparición de los miembros del Ejército Popular Revolucionario (EPR) Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya.

Esperamos que ante el llamado de mediación que hizo al gobierno la comisión, responda inmediatamente, y la respuesta que esperamos es que sea positiva, que se acepte la buena voluntad y se actúe en consecuencia, se pronunció.

El organismo civil, que preside el obispo emérito Samuel Ruiz, manifestó que aportar las pruebas sería una muestra de buena voluntad, con acciones concretas, para que se destrabe este caso y de una buena vez por todas se avance en el diálogo, suspendido actualmente y que se mantenía entre el EPR y el gobierno federal, a través de la comisión de mediación.

El gobierno federal es miope pensando en que ocultando las pruebas se mantiene la cosa como está, pero nosotros tenemos el temor de que si este caso no se resuelve, en lugar de que facilite la situación a nivel nacional, produzca casos de violencia y que pudieran ser justificados por esta negativa del gobierno federal, advirtió Martín Hernández, presidente del Sicsal en México.

Prevalecen condiciones adversas

Este martes la comisión de mediación entre el EPR y el gobierno federal informó que no reanudará sus tareas, debido a que prevalecen los obstáculos que determinaron la suspensión de sus actividades el pasado 21 de abril.

Sus integrantes manifestaron en una conferencia de prensa la necesidad de superar las declaraciones y pasar a avances sustantivos en la solución a la demanda de presentación de los eperristas.

Martín Hernández manifestó en entrevista que es muy grave la inactividad del gobierno de Felipe Calderón en torno al caso, “porque se trata de delitos graves de lesa humanidad.

“La desaparición forzada es un delito que se certifica como contra la humanidad. De modo que la postura del gobierno federal de tomar tan a la ligera la situación, de hacer caso omiso a las observaciones que ha hecho la comisión, de no responder efectivamente al llamado al diálogo, nos hacen ver que no tiene caso que se reactive la comisión si la postura gubernamental va a seguir siendo la misma.

Es mentira que el gobierno haya dado muestras de voluntad, que haya abierto los archivos y que haya aportado pruebas, porque las tiene y lo ha dicho, pero las ha mantenido bajo reserva o de plano las ha negado, aseguró.