Pueden salir adelante, pero no por la dádiva o la caridad
Sábado 13 de junio de 2009, p. 12
El presidente Felipe Calderón prometió que saldará la deuda histórica con los pueblos indígenas para que puedan salir adelante, pero no por el regalo, la dádiva o la caridad
.
Al reunirse con organizaciones que reciben recursos de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y de Sedesol, aseguró también que destinará el grueso de los programas públicos a la población carente de oportunidades y no a quienes por un error propio les vaya mal en sus empresas.
Al entregar las conclusiones del foro Encuentro México Indígena: Nuevo Amanecer, Alberto Simón, de la Alianza Indígena Mexicana, pidió que las reglas de operación de los proyectos sean más sencillas
para los representantes de grupos étnicos que tienen un nivel educativo bajo o son analfabetas.
Es difícil para nosotros presentar los proyectos, porque a veces no les entendemos y tenemos que buscar gente que nos cobra grandes cantidades de dinero
, afirmó.
Decenas de indígenas provenientes del estado de México, Oaxaca y Michoacán debieron esperar ayer más de dos horas para poder ingresar a Los Pinos.
Fue el caso de un grupo de mujeres mazahuas que salió en camiones, puestos por la CDI, a las 8:30 horas de la comunidad Guadalupe Cachi, del municipio mexiquense de Ixtlahuaca, llegó a México a las 10:30 e ingresó a la casa presidencial a la una de la tarde.
Los pobres no van a la universidad
La larga espera y el calor provocaron el llanto desesperado de algunos niños en la ceremonia encabezada por Calderón, razón por la cual su esposa Margarita Zavala se acercó para auxiliar a una madre con un bebé en brazos y la condujo hacia una zona donde había menos aglomeración.
Ataviado con una camisa bordada a mano, con hilo bramante y de seda, y un chaleco de algodón que mujeres nahuas de Puebla le obsequiaron a su llegada, Calderón se mostró satisfecho de tener esa visita tan singular
de indígenas que representan el alma de México
.
Acompañado por el titular de la CDI, Luis H. Álvarez, señaló que millones de indígenas no tienen acceso a servicio médico ni a agua potable y tampoco a una educación de calidad. Porque hoy en día, por desgracia, todavía el que tiene mucho dinero puede ir a una escuela o a una universidad muy buena y el que no tiene, no puede ir a ninguna universidad. Eso lo estamos queriendo erradicar.
El reto del gobierno, según el michoacano, consiste en dar igualdad de oportunidades a la gente para que decida con libertad si quiere salir adelante o no.
Jeannette Arriola, de la Fundación Pro Mazahua, organización que apoyó a Calderón en la campaña presidencial y ha recibido recursos de Sedesol, le pidió al presidente generar cadenas de ganar-ganar
para trabajar por los indígenas.