La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) puso a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) a 10 oficiales del Ejército, tras detectar que colaboraban con el cártel de Sinaloa, que dirige Joaquín El Chapo Guzmán Loera. Esta es la segunda vez que en año y medio elementos castrenses son acusados de colaborar con el narcotráfico.

En un comunicado de prensa, la Sedena dio a conocer que como resultado de una investigación, “la Procuraduría General de Justicia Militar detectó que un grupo de 10 oficiales subalternos filtraban información a integrantes de la organización delictiva de Guzmán Loera.

El día de hoy (sábado), dichos militares fueron puestos a disposición de la SIEDO para los efectos de su competencia, informó la dependencia.

Agregó que con el debido acatamiento a la ley y en congruencia con las políticas aplicadas por el gobierno federal, la Sedena ratifica su compromiso ante la sociedad, que su proceder en el combate al narcotráfico y el crimen organizado será firme, enérgico y decidido, por lo cual no se vacilará en juzgar y castigar conforme a derecho a los integrantes del instituto armado que incurran en este tipo de delitos.

Sin embargo, la PGR no ha proporcionado información acerca de los detenidos, como sus nombres, grado y adscripción; únicamente confirmó que fueron puestos a disposición de la subprocuraduría.

Cabe recordar que en enero de 2008 fueron capturados y puestos a disposición de la SIEDO cinco militares que presuntamente colaboraban con el cártel de los hermanos Beltrán Leyva, ex socios del de Sinaloa.

De esta manera, Francisco de Jesús Pérez Chávez, Alberto Cortina Herrera, Humberto Ramiro López Cornejo, Ricardo Ramírez León y Humberto Solís García fueron puestos a disposición del Ministerio Público Federal por ser presuntos responsables de delincuencia organizada y delitos contra la salud, en su modalidad de posibilitar el tráfico y comercio de estupefacientes.

Los cinco cayeron después de que efectivos de la Policía Federal detuvieran en Culiacán, Sinaloa, a Alfredo Beltrán Leyva, El Mochomo, aprehensión que provocó la escisión en el cártel de Sinaloa y el surgimiento de la organización de los hermanos Beltrán Leyva.

Estos militares fueron puestos a disposición del juzgado séptimo de distrito en materia penal, con sede en Jalisco, el cual les dictó auto de formal prisión los primeros días de abril de 2008.