Recife, Brasil, 13 de junio. Los restos del avión Airbus de Air France, rescatados del océano Atlántico, parecen indicar que el aparato sufrió un desastre repentino, aunque no hubo explosión en pleno vuelo, según expertos consultados por la prensa brasileña.

El Airbus A330 de Río de Janeiro a París desapareció en el mar la noche del 31 de mayo con 228 personas a bordo y las causas del siniestro siguen sin conocerse.

Autoridades militares brasileñas expusieron el viernes, en un hangar de la base aérea de Recife, decenas de pedazos recuperados del mar por la Marina durante el extenso dispositivo de búsqueda.

El ex piloto Ari Germano, autor de un libro sobre accidentes aéreos, dijo sentirse impresionado con una de las fotos divulgadas el viernes, de acuerdo con declaraciones publicadas por el diario O Globo este sábado.

Según Germano, la foto parece indicar que los pasajeros del Airbus fueron tomados de sorpresa y que la tragedia ocurrió tan rápidamente que el personal de abordo no tuvo tiempo de reaccionar.

He visto la (pared) divisoria situada entre la sección donde la tripulación prepara las comidas y el compartimiento de los pasajeros. Había asientos fijos allí. Lo curioso es que esos asientos dobles, usados por la tripulación, estaban plegados, dijo Germano.

Para el especialista, esto sugiere que la tripulación circulaba por los corredores del avión. En caso de una señal de alerta o la inminencia de un riesgo, la tripulación estaría sentada y atada a sus lugares. Ellos no tuvieron tiempo de hacer nada.

En tanto, el comandante Ronaldo Jenkins, consultor de seguridad de la Unión de Empresas Aéreas, dijo al diario O Globo que pudo identificar un chaleco salvavidas y también parte del revestimiento interno y externo de la aeronave sin encontrar en ellos rastro de fuego o humo.

Los primeros 37 fragmentos recuperados refuerzan la tesis de que el avión no estalló antes de caer (...): ninguna de las piezas muestra indicios de estar chamuscada, destacó el diario.

Otros tres cuerpos de las víctimas del accidente llegaron hoy desde alta mar a la isla brasileña de Fernando de Noronha para ser sometidos a un reconocimiento preliminar.

En total, 44 cuerpos fueron rescatados hasta hoy, según el conteo oficial. Otros seis cadáveres fueron recogidos por la embarcación francesa Mistral, pero sólo serán contabilizados por la Marina brasileña cuando sean transferidos a embarcaciones de ese país.

El jefe del Departamento de Control del Espacio Aéreo de la Fuerza Aérea Brasileña, brigadier Ramón Cardoso, confirmó la información, pero dijo que no se sabe cuándo fueron recogidos esos cadáveres.

Otros 25 cuerpos, que ya fueron identificados previamente en Noronha, partieron hoy rumbo a la ciudad de Recife para ser analizados en el Instituto Médico Legal de esa ciudad, y cuatro permanecen en la isla para análisis preliminares.