Efectivos del Ejército Mexicano y de la Policía Federal se enfrentaron a balazos este mediodía con presuntos integrantes del cártel de La Familia en el municipio de Tenancingo, estado de México, en un operativo de cateo a una posible casa de seguridad, con saldo de un agente lesionado.

Al llegar a la vivienda donde se realizaría la operación, ubicada en el centro de la localidad, elementos de ambas instituciones fueron recibidos con ráfagas de armas de alto calibre.

Militares y policías ingresaron al inmueble y sometieron a cuatro personas, que fueron remitidas a la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Toluca. Uno de los policías resultó herido de bala en la cabeza durante el enfrentamiento, y fue trasladado al Hospital General de la capital mexiquense.

En Hidalgo, la Policía Federal realizó un operativo para detener al secretario de Seguridad Pública de Pachuca, Roberto Terán Contreras, a unos 30 policías municipales y a siete integrantes de la Agencia Estatal de Investigación.

Tras las acciones, la Secretaría de Seguridad Pública de Pachuca quedó bajo el reguardo de un numeroso grupo de policías federales, además de que en los principales accesos carreteros y municipios circunvecinos a la capital hidalguense se instalaron retenes.

En Guanajuato, en las inmediaciones de San Juan del Llanito, los trabajadores de la construcción Juan Manuel Vargas y Salvador Ramírez resultaron heridos por la explosión de una granada, presuntamente arrojada por personas que circulaban en un vehículo, que a su vez eran perseguidos y se enfrentaban a tiros con elementos policiacos de Apaseo el Alto. Los albañiles fueron trasladados al hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social en la capital de Querétaro.

El saldo de ayer que dejó el crimen organizado fue de 20 asesinatos. En Guerrero, Freddy Torres y Luciano Jaimes, elementos de la policía preventiva del municipio de La Unión, fueron hallados muertos a tiros de rifle AK-47 en las comunidades Lagunillas y La Majahua, respectivamente, cuatro horas después de ser secuestrados por un grupo armado.

También en Guerrero se encontró muerto a tiros a Leonardo Rodríguez, sobre una brecha de terracería que conduce al municipio de Cuajinicuilapa.

En Chiahuahua, 11 personas fueron asesinadas en cinco municipios: siete en Ciudad Juárez y cuatro en los municipios de Guadalupe y Calvo, Villa Matamoros, Hidalgo del Parral y Camargo.

La policía municipal de Culiacán, Sinaloa, reportó dos homicidios: en el fraccionamiento La Puerta, la policía municipal localizó el cadáver de una persona no identificada, de aproximadamente 40 años, con las manos atadas; cerca del cuerpo había varios casquillos calibre 9 milímetros y un mensaje escrito. En el fraccionamiento Residencial del Humaya se descubrió un cadáver envuelto en cobijas; peritos de la procuraduría estatal señalaron que habría muerto por asfixia.

En las inmediaciones de la autopista México-Puebla, cerca de la planta armadora de autos Volkswagen de la capital poblana, se encontró el cadáver de un hombre de casi 35 años, quien tenía los ojos tapados con cinta adhesiva y estaba maniatado.

Cerca del mediodía, en el municipio de Acatzingo, también en Puebla, se ubicó otro cadáver de un hombre de entre 35 y 40 años, quien murió por asfixia, y estaba envuelto en cinta metálica. En ambos casos habían mensajes, presuntamente firmados por la organización delictiva Los Zetas, brazo armado del cártel del Golfo.

Estos homicidios propiciaron al menos dos reuniones urgentes de funcionarios de primer nivel del gabinete de seguridad pública poblano. Según fuentes oficiales, una de estas habría ocurrido en las instalaciones de la 25 Zona Militar, y en ella altos mandos de la Secretaría de la Defensa Nacional habrían tomado control de las operaciones de las corporaciones policiacas del gobierno estatal y la Policía Metropolitana; autoridades de los tres niveles de gobierno guardaron hermetismo sobre la versión.

Por otro lado, el cártel del Golfo reclutó a través de Los Zetas a 2 mil 500 pandilleros de la Mara Salvatrucha como asesinos a sueldo, ofreciéndoles a cada uno tres mil 500 quetzales (437 dólares), aseguró ayer el director general del sistema penitenciario de Guatemala, Giulio Talamotl, durante el Seminario Penitenciario Mesoamericano 2009, que se realiza en Veracruz.

Israel Dávila, Carlos Camacho, Rubén Villalpando, Javier Valdez, Martín Hernández Alcántara/La Jornada de Oriente, Mariana Chávez, Sergio Ocampo y Afp