Johannesburgo, 26 de junio. La selección estadunidense, calificada de hacedora de milagros por el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, tras la victoria ante el favorito España en semifinales de la Copa Confederaciones, piensa que en el duelo definitivo puede lograr su tercer milagro seguido. Mientras que Brasil espera retener su corona el domingo y establecerse como el más ganador del torneo, con tres títulos, desplazando a Francia, que ha sido la única en ganador dos cetros consecutivos.

El técnico de Estados Unidos, Bob Bradley, y el capitán Carlos Bocanegra indicaron este viernes –en una conferencia de prensa en Johannesburgo– que pueden repetir lo que ya hicieron contra Egipto (3-0), que les dio el increíble boleto a semifinales cuando estaban prácticamente eliminados, y España (2-0), el miércoles.

Aunque ahora la barrera parece bastante más alta: el defensor del cetro y pentacampeón mundial, que les dio una dura lección en primera fase (3-0).

Pero Estados Unidos confía en poder hacerse con su primer título de honor internacional. Sería muy importante si ganamos. Hemos obtenido la Copa de Oro de la Concacaf y por eso estamos aquí, pero imponerse en un torneo contra selecciones como España, Italia, Egipto y Brasil sería muy especial, dijo Bocanegra.

Su técnico opinó lo mismo y ya tiene el plan para tumbar a la oncena de Dunga. Creo que cuando jugamos como equipo y encontramos el equilibrio siendo agresivos e inteligentes, entonces tenemos confianza (para lograr el otro milagro), indicó.

Sudáfrica hizo un buen trabajo frustrado a Brasil, apretando sus líneas del fondo y del medio. Brasil pasó gracias a un genial tiro libre, agregó.

Bocanegra comentó que el primer partido contra los sudamericanos en la copa les ha servido de experiencia para no repetir errores. Salimos con demasiada timidez. Les tuvimos mucho respeto y nos metimos muy atrás, afirmó.

En tanto, el astro brasileño Kaká aseguró estar perplejo por el tropiezo de los españoles ante los estadunidenses, mientras otros de sus compañeros opinaron que la Furia Roja fue castigada por confiarse demasiado.

Nosotros tuvimos la humildad de luchar hasta el final, pese a que estaba difícil. Esa es la diferencia de Brasil: nosotros respetamos siempre a los adversarios. Por eso Brasil tiene cinco estrellas en la camiseta, indicó el zaguero Luisao.

Por cierto, tres futbolistas brasileños (Kaká, Luis Fabiano y Robinho) y otros tantos españoles (Fernando Torres, David Villa y Xavi Hernández) figuran entre los 10 aspirantes al Balón de Oro de la Copa Confederaciones, anunció este viernes la Federación Internacional de Futbol Asociación.

El domingo en la final se rendirá homenaje al camerunés Marc-Vivien Foé, fallecido durante un partido de la Copa Confederaciones de Francia 2003.