Houston, 7 de julio. El gobierno de Libia había invertido 500 millones de dólares de sus reservas de efectivo en la firma del magnate acusado de estafa Allen Stanford a finales de 2008, indicó el martes un documento judicial. Stanford y Andrea Stoelker, su novia, volaron a Trípoli el 25 de enero porque Libia consideraba incrementar el monto que había invertido con él, según los documentos judiciales. Stanford se reunió con varios funcionarios, inclusive Mohamed Layas, presidente ejecutivo de la Autoridad de Inversiones de Libia, indicaron los documentos. No fue posible contactar a un representante de la embajada de Libia en Washington para que hiciera comentarios. Fiscales de Estados Unidos citaron el viaje de 2009 a Libia en una audiencia de arresto como evidencia de que Stanford podría fugarse. Un juez ordenó que el magnate de Texas, que afronta cargos criminales ligados a un fraude de 7 mil millones de dólares que afectó a inversionistas de Estados Unidos y América Latina, permaneciera en prisión hasta su juicio.

El peso perdió 11 centavos en su paridad con el dólar, una depreciación de 0.83 por ciento, la más aguda en los pasados 18 días; en tanto la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró ayer sus operaciones con una caída, la cuarta de manera consecutiva, de 1.61 por ciento en su índice de precios y cotizaciones, a la par de la caída en el mercado de Nueva York. El dólar interbancario se vendió a 13.36 pesos, desde 13.25 de la víspera, en lo que constituye el mayor movimiento depreciativo desde el 19 de junio pasado en que la divisa estadunidense se vendió a 13.38 pesos. En bancos y casas de cambio, el dólar al menudeo se vendió en 13.50 pesos en los negocios menos especulativos y hasta 13.70 pesos en los más voraces.

La fracción del PRI en la Cámara de Diputados, a través de su coordinador, Emilio Gamboa Patrón, presentará una propuesta ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión para convocar a un periodo extraordinario de sesiones en San Lázaro con objeto de aprobar la Ley de Emergencia Nacional y reformas para atemperar la recesión en el país. Samuel Aguilar, representante priísta, expuso que en el ánimo del priísmo destaca la urgencia de contar con nuevas herramientas legales para garantizar salidas coherentes a la crisis económica que afecta a millones de mexicanos. El gobierno de Felipe Calderón dilapidó el poder con actitudes de soberbia y autoritarismo. Nos llevó a una guerra contra el narcotráfico que sólo en su cabeza cabe, y en el terreno económico sus pésimas decisiones lo han conducido a un callejón sin salida provocando una mayor pobreza, algo que es más grave, la desesperanza entre la mayoría de los mexicanos”.