Mientras el resto del mundo supera la recesión, en México la producción sigue en picada
El ajuste en el pronóstico, un día después que el gobierno aseguró que comenzó la recuperación
Jueves 9 de julio de 2009, p. 28
La economía mexicana acusa un desplome que duplica la magnitud prevista hace apenas tres meses, aseguró este miércoles el Fondo Monetario Internacional (FMI). Mientras el mundo comienza a levantar cabeza de lo que el organismo calificó de una recesión sin precedentes
, el aparato productivo mexicano sigue profundizando su caída. La afirmación fue hecha un día después de que el presidente Felipe Calderón y su secretario de Hacienda, Agustín Carstens, aseguraron que la crisis había tocado fondo.
En México, el producto interno bruto (PIB), la medida más amplia del valor de una economía, tendrá un desplome este año de 7.3 por ciento, anticipó el FMI, al dar a conocer ayer una actualización de sus pronósticos del comportamiento de la economía mundial. En abril pasado el organismo había estimado para este año una contracción de 3.7 por ciento. Así que el ajuste hecho ayer es de una magnitud de 3.6 puntos porcentuales.
El martes pasado, el presidente Calderón dijo a un grupo de banqueros que hay algunas señales, esos brotes verdes
de que el ciclo recesivo de México comienza a revertirse. En el mismo foro, el secretario Carstens aseguró que la economía nacional está entrando en un proceso de recuperación.
De todos los países cuyos pronósticos económicos fueron divulgados ayer por el FMI, México es el que lleva la peor parte en esta crisis. Ninguno tendrá una caída mayor. Ninguno tuvo un ajuste a la baja, de 3.6 puntos, respecto del pronóstico de abril. Otro latinoamericano, Brasil, tendrá una contracción económica este año de 1.3 por ciento, la misma magnitud prevista por el Fondo en abril pasado.
La caída en la actividad económica de México en 2009 prácticamente triplicará la media latinoamericana, que según el FMI será de 2.6 por ciento en 2009.
El FMI espera que el PIB de México repunte 3 por ciento en 2010, estimación similar a la hecha el martes pasado por el secretario Carstens, pero que, aun si ocurre, apunta a que para efectos económicos éste sea un sexenio perdido.
En 2007 y 2008, la economía mexicana creció a tasas anuales de 3.3 y 1.3 por ciento, respectivamente. Si la caída de 2009 es de 7.3 y en 2009 el PIB repunta 3 por ciento, como cree el FMI que ocurrirá, el promedio de crecimiento del producto interno bruto del país en esos cuatro años sería de 0.07 por ciento. La población crece a una tasa anual de 1.6 por ciento.
A diferencia de lo que ocurre con la dinámica esperada para México, el FMI consideró ayer que la economía mundial está empezando a salir de una recesión sin precedentes en la era posterior a la Segunda Guerra Mundial. La estabilización, apuntó, es desigual y se prevé que la recuperación será lenta.
Asia crecerá este año
Los datos recientes indican que el ritmo de contracción de la actividad económica mundial está moderándose, aunque en distinto grado en diferentes regiones. Pese a estos hechos positivos, la recesión mundial no ha terminado y se sigue previendo una recuperación lenta, dada la persistencia de fallas en los sistemas financieros
, indicó el organismo.
Entre las regiones en desarrollo, hay diferencias regionales marcadas. La economía de Asia tendrá una tasa positiva de crecimiento en 2009, que según el FMI será de 5.5 por ciento este año, superior en 0.7 puntos a la prevista en abril. Los motores son claramente China e India, con aumentos previstos de su PIB de 7.5 y 5.4 por ciento este año, respectivamente, un punto arriba de lo considerado hace tres meses. África también crecerá, 1.8 por ciento. Latinoamérica, en cambio, decrecerá 2.6 por ciento, y la región de Europa del este lo hará en 5.8 por ciento.
En conjunto, el mundo en desarrollo tendrá un repunte económico de 1.5 por ciento en 2009 y de 4.7 por ciento en 2010.
Para las economías avanzadas, el FMI estimó un decrecimiento de 1.4 por ciento este año y de 2.5 por ciento en el siguiente.
La magnitud de la caída de la economía mexicana sólo tiene referente durante la depresión de los años 30 del siglo pasado. En 1995, el PIB se contrajo a una tasa anual de 6.2 por ciento. La causa del ajuste de este año radica en la fuerte dependencia económica con Estados Unidos, país de destino de 8 de cada 10 dólares de exportaciones y origen de poco más de dos tercios de la inversión que llega al país. La industria manufacturera mexicana depende de los pedidos del sector fabril estadunidense, algo que se ha mostrado claramente con la crisis automotriz.
El FMI, en el reporte publicado ayer, indicó que en Estados Unidos los indicadores apuntan a un ritmo de deterioro cada vez menor, incluso en los mercados de trabajo y vivienda.
La caída de la producción industrial estadunidense puede estar llegando a su punto de inflexión; el ciclo del inventario está cambiando de fase y ha mejorado la confianza de empresas y consumidores, señaló. Estos hechos, dijo, coinciden con una estabilización del PIB durante el segundo semestre de 2009 y con una recuperación gradual que se perfila para 2010.
El martes pasado, el secretario Carstens consideró que con la misma virulencia
con que se desplomó en la primera mitad del año, la economía mexicana tendrá una recuperación en los meses siguientes, en la medida que se revierta el ciclo recesivo en Estados Unidos.