Pekín, 19 de julio. Miembros de un grupo de estudiantes británicos puestos en cuarentena por las autoridades chinas debido a la influenza humana se sienten indignados por su detención, mientras en Venezuela se anunciaba el primer caso mortal, y Chile afirmaba que el mal comienza a ceder.

China instauró fuertes medidas para examinar y detectar el virus A/H1N1, incluyendo tomar la temperatura de los pasajeros de los vuelos que llegan de otros países, y ha puesto en cuarentena a docenas de extranjeros desde que apareció el virus, en mayo pasado. Se han registrado unos mil 500 casos positivos, pero no se han señalado muertes.

En Venezuela, una niña de 11 meses se convirtió en la primera víctima mortal de la gripe, donde hay más de 260 casos confirmados, informó el sábado el ministro de Salud, Jesús Mantilla.

En una intervención en la televisión estatal, el responsable explicó que la pequeña tenía un cuadro clínico complicado que hizo que su caso se agravara.

Sin embargo, la enfermedad comenzó a ceder en Chile, donde se registran 40 muertes y más de 10 mil contagios confirmados, dos meses después que se diera a conocer el primer caso, dijo este sábado la subsecretaria de Salud, Jeanette Vega.

En la más reciente tabla publicada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 6 de julio, esta agencia había registrado 94 mil 512 casos confirmados en laboratorio en 136 países y territorios desde abril, incluyendo 429 muertes. No obstante, el viernes la OMS afirmó que dejaría de dar balances.

En Londres varias compañías aéreas pusieron en marcha un mecanismo para disuadir a los pasajeros que presenten síntomas de gripe de subirse a un avión. Estas aerolíneas decidieron aplicar las recomendaciones del Ministerio de Sanidad británico, que aconseja a los pasajeros que puedan haber contraído el virus A/H1N1 que posterguen el vuelo hasta que los síntomas de la enfermedad hayan desaparecido.