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Los funcionarios de la embajada responden que no se irán porque su relación es con Zelaya

Ordena el gobierno de facto hondureño la expulsión de todos los diplomáticos de Caracas

El golpe también fue contra todos los países de la Alba, sostiene el presidente venezolano

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Ariel Vargas, quien está a cargo de la legación venezolana en Honduras tras el llamado al embajador Armando Laguna a Caracas, atiende a periodistas luego de recibir la invitación del gobierno de facto a salir de HondurasFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Miércoles 22 de julio de 2009, p. 23

Tegucigalpa, 21 de julio. El gobierno de facto de Honduras ordenó el martes la expulsión del país de todos los diplomáticos de Venezuela, a cuyo presidente, Hugo Chávez, acusa de interferir en asuntos internos tras el golpe de Estado. A esto, el cuerpo diplomático venezolano en la capital hondureña aseguró que no se irá, pues la orden de expulsión fue dada por un gobierno golpista, no reconocido por Venezuela.

Según la agencia estatal de noticias venezolana, la medida se habría ampliado a todas las delegaciones diplomáticas de los países miembros de la Alba, el bloque de países izquierdistas liderado por Chávez que incluye a Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Honduras.

La vicecanciller interina, Martha Alvarado, dijo que el gobierno de facto de Honduras solicitó de manera respetuosa la salida del personal diplomático de Venezuela en un plazo de 72 horas, aunque el gobierno interino no especificó que se hubiera decidido lo mismo para el resto de países.

Esta decisión es consecuencia de las amenazas del uso de la fuerza y de la intromisión en los asuntos exclusivos de Honduras, dijo Alvarado a una emisora de radio local.

Pero el encargado de negocios de la embajada venezolana, Ariel Vargas, respondió que no acatarán la orden, puesto que su gobierno no reconoce a las autoridades surgidas del golpe de Estado militar que expulsó del poder a Manuel Zelaya el 28 de junio.

Chávez, uno de los principales aliados de Zelaya, retiró el 3 de julio a su embajador en Tegucigalpa en protesta por el golpe. Pero, según Ariel Vargas, el resto del personal se queda.

No vamos a salir de aquí, dijo a la televisión hondureña.

El gobierno legítimo de Honduras es el del presidente Manuel Zelaya. No vamos a atender la solicitud de los golpistas.

A la pregunta de si no temía que fueran expulsados por la fuerza, Vargas respondió: Sería lo único que le faltaría a este gobierno golpista (...) sería violar todas y cada una de las convenciones internacionales sobre diplomacia.

Vargas está a cargo de la embajada venezolana tras el llamado a Caracas al embajador Armando Laguna luego del golpe de Estado.

Venezuela, al igual que el resto de la comunidad internacional, no ha reconocido al gobierno de facto de Roberto Micheletti.

El canal de televisión estatal hondureño transmite desde hace días programas contra el presidente venezolano, Hugo Chávez, al que acusa de intromisión.

El presidente venezolano aseguró que el golpe perpetrado por las fuerzas armadas hondureñas contra el gobierno de Zelaya también estuvo dirigido a su país, a todas las naciones que pertenecen a la Alba y contra la esperanza de redención que ha renacido en estas tierras.

Desafortunadamente, aún en Honduras no ha surgido una corriente militar patriótica que se una al pueblo, pero tengo fe en que los soldados asumirán su papel histórico para la liberación de ese pueblo del yugo imperialista de Estados Unidos y de la burguesía pitiyanqui o pelele, agregó.