Teherán, 26 de julio. El presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, destituyó este domingo al ministro del Servicios de Inteligencia, Hossein Mohseni Ejei, apenas un día después de que se confirmó la renuncia del vicepresidente primero, Esfandiar Rahim Mashaie, por presiones de grupos conservadores.

La decisión llegó mientras Ahmadinejad, relecto para un nuevo mandato presidencial en unas elecciones que desataron fuertes protestas de la oposición, organiza su nuevo gabinete.

La oficina del mandatario confirmó la destitución de Mohseni Ejei, pero desmintió informaciones de medios locales sobre la remoción de otros tres ministros, los de Cultura, Trabajo y Asuntos Sociales y Sanidad.

El conflicto se generó el miércoles durante un fuerte intercambio verbal entre Ahmadinejad y Ejei, en el marco de las reuniones semanales del gabinete, relacionado con el nombramiento como vicepresidente de Mashaei, quien se convirtió en el centro de las críticas por sus declaraciones hechas en 2008 acerca de que Irán es un amigo del pueblo israelí y del estadunidense.

Esas afirmaciones desataron protestas políticas en las filas conservadoras y llevaron a importantes instancias, entre ellas al ayatollah Alí Jamenei, a solicitar la destitución del vicepresidente, y el miércoles, Ejei le pidió que reconsiderara la designación de Mashaie.

Continúan los reproches contra Ahmadinejad

Aún este domingo, los conservadores reprochaban a Ahmadinejad no haber aplicado inmediatamente la orden del guía supremo Jamenei de destituir al vicepresidente primero y haber dejado que Mashaie, quien es suegro de su hijo, anunciara su remoción el sábado.

Ahmadinejad debe controlarse. Se podría decir que quiere crear voluntariamente tensión, estimó el diputado conservador Alí Motahari. Si es por eso (las críticas contra Mashaie) por lo que los ministros fueron cesados como informaron los medios locales, entonces se convierte en un asunto personal que no tiene nada que ver con el interés del país, continuó.

Ahmadinejad debe prestar juramento ante el Parlamento el 5 de agosto y enseguida presentar su gobierno, mientras los líderes opositores Mir Hossein Mussavi y Mehdi Karubi retomaron el control de las protestas que surgieron tras las elecciones del 12 de junio y de las que salió relecto Ahmadinejad.