El tercer recorte al presupuesto del Distrito Federal dependerá de la transferencia de recursos que aprobó la Cámara de Diputados para la construcción de la línea 12 del Metro y de que se acuerde con el gobierno federal un mecanismo de endeudamiento temporal o financiamiento para las entidades federativas, explicó el secretario de Finanzas, Mario Delgado Carrillo, quien planteó para esto último recurrir al fondo de pensiones de 60 mil millones de pesos que se creó con excedentes petroleros en años anteriores y se mantienen ociosos.

Tras participar en el foro El agotamiento de un modelo de desarrollo ¿hacia dónde va México?, organizado por la Escuela de Administración Pública del Distrito Federal, el funcionario advirtió que para hacer frente a la reducción de las participaciones federales, será necesario recurrir a un financiamiento o endeudamiento que permita a las entidades enfrentar en el mediano plazo la insuficiencia de recursos.

En el caso del DF, dijo que puede haber algunas acciones para obtener ingresos adicionales, un recorte en el gasto, pero será insuficiente y lo que se está planteando con el conjunto de las entidades es usar el citado fondo de 60 mil millones, destinado a apoyar reformas de pensiones en los estados, que no ocurrieron porque tampoco hubo reglas de operación para esos recursos, entonces creo que podrían utilizarse en estos momentos de coyuntura para subsanar el desequilibrio fiscal en la mayoría de las entidades y posteriormente reponerlo a mediano plazo.

Delgado Carrillo consideró además urgente modificar la fórmula para la distribución de las participaciones federales, de manera que se privilegie el desarrollo de algunas regiones, aprovechando sus potencialidades, y pueda llevar al país a tasas de crecimiento mayor, particularmente en la zona centro del país, donde la ciudad de México es la concentración económica más importante, pero se le siguen disminuyendo los recursos.

Señaló que la ciudad está haciendo grandes esfuerzos para mantener la obra pública y los programas sociales. Sólo en el primer caso, refirió, la inversión del GDF significa 25 por ciento de su presupuesto, cuando a escala nacional es de 14 por ciento, y con las medidas económicas aplicadas por el gobierno federal prácticamente se está renunciando en 2010 a no tener inversión en infraestructura en el país al no haber ingresos adicionales.