Liberan a once soldados ecuatorianos que cruzaron a territorio colombiano
Lunes 10 de agosto de 2009, p. 24
Quito, 9 de agosto. En medio de una serie de tensiones diplomáticas y la confusa retención de un grupo de militares ecuatorianos en Colombia, el canciller de Ecuador, Fander Falconi, advirtió que el uso de bases militares estadunidenses en el país vecino podría desatar alocadas carreras armamentistas
en la región y lamentó que Quito tenga marcadas diferencias
con Bogotá, porque mientras nosotros tratamos de construir una zona de paz e integración, ahí se está generando un convenio que implica un factor constante de preocupación, alarma y desestabilización regional
.
El ejército de Colombia retuvo el sábado a 11 soldados ecuatorianos que ingresaron al departamento colombiano de Putumayo y aunque el incidente quedó resuelto este domingo con la devolución de los militares a su país, el Ministerio de Defensa de Ecuador dijo en su primera reacción que este problema administrativo
sólo involucró a dos conscriptos desarmados que cruzaron la frontera para comprar alimentos
; más tarde, la dependencia aceptó que fueron 11 los detenidos.
El ministro de Seguridad Interior y Exterior, Miguel Carvajal, dijo a la cadena Telesur que el incidente no debe empañar la situación en la frontera
, donde el primero de marzo del año pasado hubo un bombardeo colombiano sobre un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia ubicado en territorio de Ecuador. Este hecho derivó en la ruptura de relaciones bilaterales, aún sin restablecer.
El incidente fue dado a conocer justo el día en que Ecuador celebra dos siglos del primer grito
de independencia en América hispana y un día antes de que el presidente Rafael Correa, relecto en abril pasado, asuma su nuevo mandato de cuatro años con la presencia de todos los mandatarios sudamericanos, excepto el colombiano Álvaro Uribe, que no fue invitado más que a la cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas, que se celebrará mañana mismo aquí.
En la localidad andina de Cayambe, en el norte de Ecuador, Correa recibió el bastón de mando indígena en una ceremonia especial a la que asistieron decenas de personas de pueblos originarios de la Amazonia y los Andes. El mandatario estuvo acompañado de su par boliviano, Evo Morales, y de la premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú.