Magdalena Apasco, Etla, Oax., 16 de agosto. La responsabilidad de la crisis económica por la que atraviesa el país no es exclusiva de Vicente Fox y Felipe Calderón, sino de la oligarquía que nos impusieron en la Presidencia de la República y que prepara ya, con la ayuda de los medios de comunicación, un nuevo títere como es el ahijado de Carlos Salinas, Enrique Peña Nieto, para tenerlo al servicio de una mafia de la política que quiere seguir conservando el poder absoluto del país, aseguró Andrés Manuel López Obrador.

Al iniciar la tercera etapa de una gira por los municipios de usos y costumbres de esta entidad, el tabasqueño insistió en que “con la complicidad de los medios de comunicación, y particularmente de las televisoras, la guerra sucia en 2006 se sostuvo en mucho con mensajes, los cuales advertían que si se producía el cambio que proponíamos nosotros iba a haber inseguridad pública, violencia, fuga de capitales, devaluación y crisis. Es decir, todo lo que la gente está sufriendo en este momento y que se hubiera podido evitar si nos hubieran respetado el triunfo”.

Sin embargo, agregó, la mafia de la política impuso a uno de sus empleados para seguir mandando en México. Se trata, dijo, de un grupo que no quiere ninguna transformación porque a ellos les ha ido muy bien con la política económica antipopular que se ha venido aplicando los últimos 26 años, de ahí que quieran destruirnos políticamente porque este movimiento, que lucha por un cambio de esa política económica extremista y una renovación de la vida pública del país, es el que más les preocupa.

Recordó que la víspera Vicente Fox declaró que la crisis económica que padece el país es culpa de los astros y de las malas vibras; mencionó también que Felipe Calderón ha dicho otras idioteces como ésa, pues declaró en su momento que las inundaciones en Tabasco eran por culpa de la luna llena, y más recientemente también sostuvo que si los jóvenes se drogaban era porque no conocían a Dios. Con esto queda más que claro: la culpa de la situación por la que atraviesa México no es responsabilidad suya, sino de quienes los llevaron a la Presidencia y los que se han dejado engañar por los medios de comunicación y toda la propaganda que manejan.

Se congratuló, sin embargo, de que a pesar de la manipulación de los medios de comunicación, como Televisa, propiedad del banquero Roberto Hernández; del dueño de Cemex, Lorenzo Zambrano; del propietario de Minera México, Germán Larrea, o el traficante de influencias Claudio X. González, miembros de esta mafia de la política, cada vez hay más mexicanos conscientes que no se dejan manejar por quienes desinforman y administran así la ignorancia del pueblo.

Aseveró que ahora, cuando la crisis económica ha alcanzado niveles que no se habían visto en la historia reciente del país, o cuando se escuchan declaraciones como las que Fox y Calderón han hecho recientemente, los medios se rasgan las vestiduras y parecen olvidar que ellos crearon a personajes como los mencionados Fox y Calderón. Y no contentos con esta tragedia construyen como por orden de la oligarquía a un nuevo títere, cuya ideología se reduce al copete, para el relevo en la Presidencia de la República. Ya lo están fabricando Televisa y otros medios; Peña Nieto es ahijado de Carlos Salinas, es decir, son del mismo grupo que ha hundido al país, y es necesario que nos demos cuenta de que ya no se puede soportar lo mismo.

En respuesta a las insistentes demandas sociales de una gran alianza de las izquierdas, López Obrador respondió que, si bien es importante el acuerdo arriba, lo que va a definir el futuro de la oposición es la organización social desde abajo, y condenó que existan dirigentes de izquierda que sólo se enfocan en los cargos que van a ocupar. Piensan sólo en la forma de sacar provecho en lo personal. Ésos ya son iguales que los del PRI y los del PAN, ya no ayudan a la izquierda en el país, dijo López Obrador, luego de subrayar que sin la organización del pueblo no puede haber salida para el país.

A lo largo de su recorrido, en el que ha visitado ya todos los municipios de usos y costumbres de los distritos de Tlaxiaco, Teposcolula y Coixtlahuaca, López Obrador estuvo acompañado por los senadores del PRD Salomón Jara y de Convergencia Gabino Cué; este último condenó no sólo que 60 por ciento de las cabeceras municipales de Oaxaca no tengan accesos pavimentados, sino que en sólo cuatro años el gobierno de Ulises Ruiz haya endeudado a la entidad con más de mil millones de pesos.

Finalmente, el tabasqueño llamó a los oaxaqueños a no dejar pasar la oportunidad que les representan las elecciones de gobernador y sacudirse a un régimen priísta que, para ganar en el proceso del pasado 5 de julio, echó mano de miles de millones de pesos de los presupuestos de las entidades que gobierna.