Domingo 30 de agosto de 2009, p. 23
Tokio, domingo 30 de agosto. Los colegios electorales abrieron a las 7 horas para los comicios legislativos, que podrían deparar hoy un cambio político histórico en la segunda potencia económica mundial.
Unos 103 millones de japoneses están llamados a las urnas para elegir a 480 diputados, que designarán al primer ministro. Los últimos sondeos pronostican una victoria del Partido Demócrata de Japón (PDJ), la principal fuerza política de la oposición centrista, y la derrota del Partido Liberal Demócrata (PLD), de derecha, que gobierna el país asiático casi ininterrumpidamente desde 1955.
El PDJ podría alzarse con una victoria aplastante sobre el derechista PLD, conquistando 300 de los 480 escaños de la Cámara.
La elevada intención de voto atribuida a los centristas –el doble de los conservadores– refleja la inquietud de los japoneses por la desigualdad social y su deseo de cambiar un modelo cincelado por 54 años de conservadurismo.
El milagro económico
Artífice del milagro económico
que convirtió Japón en segunda potencia económica mundial, el PLD pudo mantenerse en el poder político desde 1955, con una breve interrupción de 10 meses en los años 1990, apoyándose sobre la industria y la todopoderosa burocracia estatal.
Ahora el partido está pagando las consecuencias de las reformas liberales del ex primer ministro Junichiro Koizumi (2001-2006), que agravaron las desigualdades.
Consciente del descontento de la población, el PDJ ha centrado su campaña en torno al lema Una política al servicio de la vida de la gente
, y promete subsidios familiares, gratuidad parcial de la enseñanza, ayuda a desempleados, pensiones mínimas por vejez y la abolición de peajes de autopistas.
El PDJ es un movimiento cuyos miembros son tan diferentes que no tienen en común más que su oposición al PLD. Fue fundado en 1996 por personajes diversos como el disidente Yukio Hatoyama; tres partidos opositores, entre los que había ex socialistas, lo reforzaron dos años más tarde.
Esta disparidad puede plantear problemas en política exterior. Los responsables del PDJ tendrán por tanto que acercar posiciones entre pacifistas y nacionalistas.
En caso de que ganara, Hatoyama, rico heredero de una larga dinastía de políticos comparada con los Kennedy, será elegido premier por el nuevo Parlamento, posiblemente a mediados de septiembre. Su adversario, el primer ministro Taro Aso, de 68 años, adinerado y sin complejos, ha esgrimido su experiencia y su sentido de la responsabilidad, frente a un partido que nunca ha gobernado.