l certamen rebasó la mitad del torneo regular y pocos son los que levantan la mano rumbo a la liguilla: Toluca, América, Monterrey, Morelia y Cruz Azul, y con mayores altibajos les siguen Santos, Pachuca y Puebla, mientras el resto de los equipos se pierde en la mediocridad.

Toluca y América marchan con paso regular casi desde el arranque. El único episodio que hace ruborizar a los mexiquenses es la paliza recibida de las Águilas, en la fecha seis, mientras los dirigidos por Jesús Ramírez no supieron aprovechar el duelo frente al llamado cheque al portador, el colero Querétaro, y obtuvieron un gris empate.

Esta semana robaron cámara dos cuadros dirigidos también por mexicanos: Monterrey y Cruz Azul. El equipo de Víctor Manuel Vucetich está rescatando el honor del futbol regio y ya es sublíder, justo cuando Tigres se hunde en la inoperancia y la polémica, después de que a Daniel Guzmán se le ocurrió decir que la felina no es la mejor afición del país, para luego, como hacen muchos, señalar que la prensa lo malinterpretó.

Los Cementeros ligaron su cuarta victoria consecutiva de la mano de Enrique Meza, un indicio claro de que se avanza hacia la anhelada regularidad. El equipo tiene otro motivo para celebrar, pues el delantero Emanuel Villa se apoderó del liderato de goleo.

El ariete argentino está en la vía adecuada para convertirse en el nuevo ídolo de la afición celeste, con un trabajo eficaz y actitud humilde. La directiva del Cruz Azul puede sonreír rumbo a la segunda parte del torneo, aunque el negrito en el arroz es todavía la escasa convocatoria que registra el equipo en el estadio Azul.

Los Pumas de Ricardo Ferretti ya no perdieron. El deprimido campeón salió vivo de una complicada aduana como es el estadio Cuauhtémoc, cuando se comenzaba a hablar de medidas disciplinarias para el plantel. El empate es un buen resultado para restañar heridas y recibir el próximo domingo a Chivas.

Raúl Arias debutó en el timón del Guadalajara con todos los reflectores encima. Como bien dicen: mata un perro y toda la vida te dirán mataperros. Arias ya tiene tatuada en la piel la etiqueta de técnico defensivo y difícilmente se la quitará, pero su experiencia y talento son incuestionables.

La magra victoria lograda sobre Jaguares dio tres puntos valiosos al popular equipo tapatío en el momento preciso, todavía con tiempo suficiente para pelear un sitio para la liguilla. En todo caso, los aficionados inconformes con su llegada pueden reclamarle a Jorge Vergara por sus impredecibles arranques y cambios de postura.

Pero el empresario está en lo suyo. Cierta sapiencia lo hizo optar por no hacer declaraciones y abocarse a los negocios. La semana pasada su equipo fue a recolectar dólares a Kansas City, en juego amistoso contra el América, y este miércoles irá a Pasadena, California, contra Chivas USA. Al cabo tiene su propio contrato con la empresa SUM, que también concerta los partidos del Tri.

Aarón Padilla, titular de la comisión de arbitraje, optó por la táctica del avestruz enmedio de una lluvia de críticas. Se negó a hacer declaraciones y dejó despotricar a la directiva de Estudiantes, que sin su técnico Miguel Herrera en el banquillo y sin Barullo Marioni en el campo, simplemente no pudo ante Morelia, y ya no tuvo a quién echarle la culpa. No obstante, los errores arbitrales siguen.

Jorge Gasso no marcó un claro penal cometido contra Néstor Calderón en el estadio Nemesio Diez y todavía amonestó al atacante; Germán Arredondo perdonó una expulsión a Emanuel Villa, mientras Armando Archundia omitió decretar la pena máxima al portero Sergio Bernal por empujar a Borgetti en el Puebla-Pumas, y Paul Delgadillo cometió una imprudencia que pudo ser de graves consecuencias al no facilitar pronta atención a Javier Chicharito Hernández y, prepotente, expulsó a Raúl Arias por reclamarle su actitud.

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