Bajarán los costos de producción en esa área, asegura la agencia internacional
Banqueros e industriales ya apuestan al desarrollo y explotación de innovaciones en la materia
Lunes 19 de octubre de 2009, p. 45
Helene Pelosse, directora de la recién creada Agencia Internacional de Energías Renovables (Irena, por sus siglas en inglés), asegura que en el sol, el viento y el calor de la tierra se encuentra la solución a los requerimientos energéticos que México tendrá cuando ya no cuente con petróleo.
Puntualiza que la energía solar tiene mayor potencial en el país, debido a sus características geográficas y a que los costos de producción bajarán mucho en los años próximos. En este campo se va a registrar una revolución similar a la que se observó en la computación y la telefonía: los rendimientos van a crecer y los gastos se van a reducir mucho.
En apoyo a su argumentación señala que algunas empresas productoras de paneles solares han informado que sus costos de producción disminuirán 6 por ciento cada año.
Luego de asistir al Foro global de energías renovables que se realizó en León, Guanajuato, en la primera semana de octubre, Pelosse afirma que actualmente, en Alemania, el gasto para instalar paneles producidos en China es igual al que se efectúa para generar electricidad por otros medios.
Frente al planteamiento de que en México aún es cara la instalación de esos equipos, la directora del Irena acepta que la inversión inicial es alta, pero lo que hay que mirar es el costo total del proyecto y el rendimiento. Si hoy se construye una casa con paneles solares, éstos tendrán una duración de 25 a 30 años. En ese tiempo, ¿cuál será el costo de la energía derivada del petróleo?, se pregunta.
Se puede sustituir 100% de la energía fósil
En entrevista, la funcionaria de origen francés asegura que 100 por ciento de la energía fósil se puede sustituir por la renovable. No hay ninguna aplicación en la cual no se pueda utilizar. Por ejemplo, abunda, en el transporte se usan biocombustibles o vehículos eléctricos.
Destaca que se pueden bajar mucho las emisiones de gases de efecto invernadero si se apuesta a las energías renovables, y señala que la crisis económica mundial no evita esa posibilidad. Por el contrario, dice, el porcentaje de crecimiento fotovoltáico solar es de 70 por ciento en todo el orbe y el de la energía eólica es un poco más bajo. Solamente basta con que el precio del crudo vuelva a subir a 100, 150 o 200 dólares para que las tasas de crecimiento de las energías alternativas aumenten.
La directora de la Irena llama la atención sobre el hecho de que durante muchos años fueron los idealistas los que promovieron el uso de energías renovables, pero ahora quienes hacen eso son los bancos en Wall Street o las aseguradoras en Alemania. Estas últimas decidieron entrar a este ámbito luego de constatar lo que les cuesta el cambio climático, explica.
Pelosse recuerda que en el foro global de León estuvo presente el empresario Carlos Slim, quien manifestó su intención de participar en el campo de las energías renovables. Si las 35 empresas más grandes del país empiezan a invertir en ese sector, México va a avanzar muy rápido en la materia
Por último, refiere que la Irena, a la cual México se acaba de adherir, realizará una especie de mapeo de todas las energías que existen para ayudar a cada país a escoger la más adecuada.