La Procuraduría General de la República (PGR) inició una averiguación previa en torno al asesinato del comandante de la Policía Federal José Alfredo Silly Peña –funcionario cercano al secretario de Seguridad Pública (SSP) federal, Genaro García Luna– y la desaparición de tres agentes que fueron levantados por grupos del crimen organizado en Galeana, Chihuahua, el pasado 20 de octubre.

Hasta ahora tanto la PGR como la SSP federal han mantenido absoluto hermetismo acerca del caso, y por ello ni siquiera se ha dado a conocer el lugar de las exequias del comandante Silly.

De acuerdo con funcionarios de la SSP, el cadáver de Silly fue localizado junto al vehículo en que pretendía viajar con tres agentes federales del municipio de Galeana a la comunidad mormona de LeBarón, a fin de dar seguimiento a investigaciones relacionadas con los secuestros de miembros de esa población.

El levantón de los tres agentes federales –cuyas identidades se mantienen en secreto– y el asesinato de Silly ocurren en una zona que se ha convertido en centro de confrontaciones entre grupos del crimen organizado, sobre todo células de las llamadas Línea y Gente Nueva, que obedecen a los cárteles de Juárez y Sinaloa, respectivamente.

En esa localidad fueron ejecutados el líder de la comunidad mormona Benjamín LeBarón y su cuñado Luis Widmar, homicidios que llamaron la atención de las autoridades federales.