Guatemala, 26 de octubre. El presidente Felipe Calderón propuso una mayor coordinación con Guatemala en materia de seguridad y sostuvo que muchos apoyan la franca retirada en la lucha contra el crimen, pero defendió su estrategia al señalar que si la fuerza del Estado es más vigorosa, por medio de la coordinación se vuelve invencible.

Narcotráfico y migración fueron los puntos centrales de la agenda que Calderón desahogó con su homólogo Álvaro Colom en su visita de Estado, que concluye este martes.

El mandatario admitió que los centroamericanos han sufrido una historia de abuso y vejación en México y anunció que para 2010 todos los guatemaltecos podrán obtener una forma migratoria de visitante local que les permitirá visitar la franja fronteriza mexicana sin pasaporte.

En el Palacio de la Cultura, el presidente y su comitiva, integrada por los secretarios de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa; de Seguridad Pública, Genaro García Luna, y de Economía, Gerardo Ruiz, además de los gobernadores de Chiapas, Juan Sabines; de Quintana Roo, Félix González Canto, y de Campeche, Fernando Ortega, fueron recibidos por Colom y sus 14 ministros.

Concluido el encuentro y un almuerzo, se formalizó en un comunicado conjunto la instrucción del gobierno mexicano de que el próximo año se amplíe la forma migratoria de visitante local para que todos los guatemaltecos puedan acceder a la misma y poder ingresar a Chiapas, Tabasco, Campeche y Quintana Roo, en un radio de 100 kilómetros, durante 72 horas.

Actualmente, 105 mil personas que viven en siete departamentos de Guatemala cuentan con ese formato. La nueva credencial de visitante se dará a todos los habitantes, además tendrá fotografía e información biométrica y, según las autoridades mexicanas, servirá sobre todo para quienes crucen la frontera el fin de semana.

Calderón afirmó que su gobierno ha buscado erradicar las formas de discriminación y vejación y por eso propuso y logró que el Congreso de la Unión erradicara del Código Penal la figura delictiva de la migración ilegal.

En tanto, Colom manifestó el interés de su país por enviar autoridades a los lugares donde prestan servicios los trabajadores guatemaltecos para que puedan desarrollar actividades de protección y asistencia previstas en la Convención de Viena sobre Relaciones Consulares.

De acuerdo con el comunicado, los presidentes de Guatemala y México además acordaron unir esfuerzos en el combate al narcotráfico, la delincuencia organizada, la trata y tráfico de personas, el lavado de dinero y tráfico de armas sin aterrizar en medidas concretas.

En el tercer punto de su visita, en la sesión solemne del congreso guatemalteco, Calderón hizo una férrea defensa de la estrategia que ha seguido en lucha contra la criminalidad, luego de haber recibido el reconocimiento de Colom y del presidente del congreso local, José Alejos Cámbara.

Golpeando el atril con el dedo para dar énfasis a su discurso, el mandatario mexicano señaló que la pregunta no es si los estados enfrentan al crimen organizado de manera ordenada, coordinada, determinante y victoriosa o lo hacen en franca retirada y sumisión, como muchos proponen y rechazó que esté obsesionado con el combate a las drogas. Los gobernadores de Chiapas y Quintana Roo se incorporaron media hora tarde a la sesión legislativa.

Producto de esta visita, Guatemala y México suscribieron cuatro convenios bilaterales. La presidenta del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), Jacqueline Peschard, firmó un memorando de entendimiento para dar apoyo al país centroamericano en esta materia con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Guatemala.

Además, decidieron reconocer certificados de estudio, títulos y grados académicos de primaria a nivel medio superior y cooperar para incluir a las mujeres en las políticas públicas y para ayudar a México a desarrollar vivienda.